Hola, buenos días, hoy Sión nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
CUESTIÓN DE MOTIVACIÓN
Una de las monjas mayores de la Comunidad está desesperada con el Noviciado:
-Por favor, -nos suplica- ¿cuánto hace que no os limpiáis los zapatos? Si no se necesitan más que unos minutos...
Y lo cierto es que tiene toda la razón, pero es que, en esos minutos, ¡damos la vuelta al mundo! Podemos aprovecharlos para tantas otras cosas, que los zapatos siempre se quedan en "Problemas secundarios".
Sin embargo... ¡de hoy no pasa! ¡¡Esta noche vienen los Reyes Magos!!
Siempre me ha encantado esta noche en el monasterio. Especialmente me impresionan las monjas de Comunidad... Nervios, risas, ilusión... Algunas incluso van avisando a todas de que "¡Ya se oyen a lo lejos las pisadas de los camellos!"
Hoy más que nunca se hace patente la frase de Jesús de que sólo los que son como niños entrarán en el Reino de los Cielos. Y es que, este día, los que más disfrutan, los que esperan con más ilusión, son los más pequeños, ¡los que se dejan sorprender!
¿Y tú? ¿Cuántos años tiene tu corazón? ¿Serás capaz de saltar por encima de tus razones para dejarte llevar por el corazón? Cristo te invita en esta noche a que recuperes la sorpresa, la ilusión. ¡Él te ofrece un corazón de niño!
Hoy el reto del amor es limpiar tus zapatos para los Reyes Magos. No importa la edad que tengas, ni si vives solo o en familia: ¡los Reyes Magos se merecen unos zapatos limpios! Pídele a Cristo que sacuda el polvo de "acostumbrarse", y que haga que tu corazón reluzca abrillantado por la ilusión renovada. Y, sobre todo, recuerda que, en cualquier momento, podrás bailar de alegría, pues Cristo nos ha hecho el regalo más grande: ¡¡Él mismo!! ¡Feliz día y... feliz y especial noche!