Hola, buenos dÃas, hoy Sión nos lleva al Señor. Que pases un feliz dÃa.
UNA APUESTA POR AMOR
Más de una vez te hemos compartido en el reto la buena relación que tenemos con las Carmelitas Descalzas, las otras monjas de clausura que viven en Lerma.
¿Recuerdas sus campanas? SÃ, ellas hacÃan sonar su campanario para felicitarnos los dÃas de nuestras fiestas (como el dÃa de Santo Domingo) y nosotras hacÃamos lo mismo en sus dÃas especiales (como la fiesta de la Virgen del Carmen).
Incluso las novicias nos hemos empapado de este cariño tan especial desde que entramos en el monasterio, y esperamos con ilusión ese repiquete tan lleno de afecto.
Sin embargo... esta tarde, las campanas carmelitanas sonarán por última vez.
SÃ, nuestras hermanas carmelitas se van a otro convento. Son pocas monjas, y van a unirse con otra comunidad. Esta tarde tendrán una EucaristÃa de acción de gracias por los 400 años que han pasado en Lerma. A modo de despedida, han escrito una carta en la que plasman su legado: "Sólo Dios basta".
Efectivamente, eso es lo que nos han enseñado nuestras hermanas. El Señor puede pedirnos muchos cambios: cambios en nuestras costumbres, en nuestros horarios, en nuestra forma de ser... Cristo quiere sacar la mejor versión de ti, pero, para ello, necesita que te fÃes, que seas capaz de dejar atrás tus seguridades para lanzarte a la aventura que te propone. Tenemos una seguridad inamovible: que el amor del Señor se renueva cada mañana. Pase lo que pase, el amor de Cristo permanece para siempre. A veces es fácil; en otros momentos, es muy difÃcil... pero, sea lo que sea, ¡todo menos perderte, Señor!
Hoy el reto del amor es orar por nuestras hermanas carmelitas. Te invito a que te unas a su acción de gracias por estos 400 años de bendiciones e intercesión en Lerma, ¡que en esta nueva etapa que comienzan sigan siendo testimonio del amor de Cristo! Os queremos, hermanas; en el Señor siempre estaremos unidas, aunque ahora nos separe una mayor distancia. Gracias por vuestro testimonio. Gracias por vuestro SÃ.