Hola, buenos días, hoy Lety nos lleva al Señor. Que pases un feliz día. Y hoy oramos especialmente por Sión, en el 7º aniversario de su entrada. ¡Felicidades!
ARREGLO SILENCIOSO
Hace unos días se rompió la tapa y el asiento del wáter. Desde entonces, lo primero que hacías era dar un grito por el pellizco que te propinaba al sentarte. Lo curioso es que comenté que estaba rota y me dijeron que ya habían encargado una nueva, pero que tenía que venir.
Después de un rato, noté que una hermana se iba del recreo. Yo salí para buscar una cosa que me pidió la Madre Priora... y vi a esta hermana vendando con papel higiénico la zona partida del asiento del wáter. ¡Así ya no pellizca!
Ella se volvió al recreo y pensó que nadie la había visto. Lo que me ha impresionado es que ha pasado totalmente desapercibida. Todas nos hemos alegrado de esta provisional solución, pero no se ha sabido quién fue la autora. El amor de esta hermana ha sido lo que la movió a hacerlo y luego a pasar desapercibida.
Después me pasé todo el día orando y pensando cómo el pasar desapercibido no siempre es fácil. Con frecuencia el querer sobresalir sobre los demás nos juega malas pasadas, y sale el orgullo.
Pero, al ver la actitud de esta hermana, me di cuenta de que el pasar desapercibido no es cosa de tontos, es cosa de listos y nobles... pues, cuando somos capaces de hacer el bien sin necesidad de reconocimientos, es porque el amor ha alcanzado en nuestra vida mucha fuerza. Te das cuenta de que Cristo no te quita nada y te lo da todo, te enseña a amar y a disfrutar en lo que haces, y, en ese momento, crece tu autoestima al sentir la alegría de estar entregándote sin pedir nada a cambio.
Pero es tan fácil caer en la tentación de colgarnos medallas... porque en el fondo nos gustan, o que nos aplaudan, o que hablen bien de nosotros; y construimos nuestro ser sobre eso. Y tarde o temprano se cae porque no tiene vida. La vida la vas a encontrar en el Amor, y desde el Amor tu corazón estará totalmente feliz y se podrá entregar y pasar desapercibido.
Hoy el reto del amor es... ¡atréverte a pasar desapercibido! Haz el bien a una persona sin mirar quién es, entrégate a alguien sin segundas intenciones de corazón. No tengas miedo a parecer "tonto" por no ser reconocido en lo mejor que haces. Te aseguro que si hoy trabajas con ilusión desde el amor, los aplausos, sonoros o silenciosos, llegarán solos. Pero tu corazón estará feliz de amar con el amor de Cristo, un amor total.