Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
¿SE TE HAN PEGADO LAS SÁBANAS?
Llevo varios días fijándome en una monja que, por las mañanas, llega al coro con una línea de pequeñas y redondas marcas en la cara. Es inconfundible, seguro que se trata del rosario.
Me hacía gracia pensar que a esta hermana no se le "pegan las sábanas", sino el rosario. Tiene pinta de que se duerme con él y que no lo suelta durante la noche.
¿Y a ti? ¿Se te pegan las sábanas, o el rosario?
Al menos a mí, me ocurre muchas veces que, cuando un problema me quita la Paz, o cuando necesito tener el valor de sentarme a orar y pedirle luz al Señor, resulta que me veo huyendo por la vía de escape.
Sí, porque, durante el día, es fácil evadirse con las tareas, con esto y aquello, pero, cuando llega la hora de parar, la noche, es entonces cuando se te presentan estas dos opciones: orar, o marcharte a dormir para no tener que hacerlo.
Esa noche duermes inquieto y no descansas, y a la mañana siguiente te levantas sin paz y peor de cómo te acostaste.
Sin embargo, cuando he experimentado el quedarme con el Señor, orar aquello que me ha quitado la Paz, y sin prisa, realmente he encontrado el descanso en Él. En la oración descubres de nuevo su Amor sobre ti, y le puedes entregar todo. Entonces sí que puedes descansar tranquilo.
Hoy el reto del Amor es desgranar las cuentas del rosario cuando algún problema te quite la Paz. Pídele a María que te muestre a Jesús, que te conduzca a Él, para que puedas dejar en Cristo todo lo que te inquieta, y vivir descansado y con Paz.