SU SANTIDAD PÍO XI, EN LA VANGUARDIA DEL PROGRESO
Con esta fotografía -en cuyo pie de foto podemos leer: Su Santidad Pío XI es el primer Papa que tiene teléfono en su despacho particular- Mundo Gráfico publicó el 10 de diciembre de 1930 lo que para nosotros es ahora una curiosa noticia.
"A las once de la mañana del día 19 del pasado noviembre se ha inaugurdo el servicio telefónico automático en la Ciudad del Vaticano. Su Santidad Pío XI, al bajar la palanca que pone en comunicación el Vaticano con el servicio telefónico del mundo, ha hecho realidad su frase: El desarrollo moderno de las comunicaciones entre las naciones es un nuevo medio que la Providencia ha puesto a disposición del hombre para que pueda ampliar en condiciones favorables su alta misión en la Tierra.
Pío XI es el primer Pontífice que cuenta con un teléfono en su mesa de despacho, relacionándose así con los 300 aparatos de la Ciudad del Vaticano y los 33 millones de teléfonos internacionales. En este caso, el aparato viene a ser como la antena espiritual por donde llegarán a la Ciudad Vaticana las intensas palpitaciones del mundo moderno. Y nada como el teléfono, en estos momentos en que la Tierra se presenta en desasosiego e inquietud constantes, para que Su Santidad pueda en todo instante advertir el rumor de las criaturas sobre las que ejerce su divino Pastorado.
La implantación del servicio telefónico automático en la Ciudad Vaticana es análogo en su sistema al que funciona aquí en España. Los trabajos de instalación han sido primorosamente realizados, ya que han tenido los cables que atravesar galerías de magno interés artístico e histórico, y que debían pasar, y así ha sido, sin el menor detrimento de las joyas pictoricas".
Hoy, Su Santidad Pío XI, al confiar su preciosa palabra al dorado estuche del micrófono, podrá sentir la plenitud del Pastor de almas que dirige personalmente sus ovejas.
"A las once de la mañana del día 19 del pasado noviembre se ha inaugurdo el servicio telefónico automático en la Ciudad del Vaticano. Su Santidad Pío XI, al bajar la palanca que pone en comunicación el Vaticano con el servicio telefónico del mundo, ha hecho realidad su frase: El desarrollo moderno de las comunicaciones entre las naciones es un nuevo medio que la Providencia ha puesto a disposición del hombre para que pueda ampliar en condiciones favorables su alta misión en la Tierra.
Pío XI es el primer Pontífice que cuenta con un teléfono en su mesa de despacho, relacionándose así con los 300 aparatos de la Ciudad del Vaticano y los 33 millones de teléfonos internacionales. En este caso, el aparato viene a ser como la antena espiritual por donde llegarán a la Ciudad Vaticana las intensas palpitaciones del mundo moderno. Y nada como el teléfono, en estos momentos en que la Tierra se presenta en desasosiego e inquietud constantes, para que Su Santidad pueda en todo instante advertir el rumor de las criaturas sobre las que ejerce su divino Pastorado.
La implantación del servicio telefónico automático en la Ciudad Vaticana es análogo en su sistema al que funciona aquí en España. Los trabajos de instalación han sido primorosamente realizados, ya que han tenido los cables que atravesar galerías de magno interés artístico e histórico, y que debían pasar, y así ha sido, sin el menor detrimento de las joyas pictoricas".
Hoy, Su Santidad Pío XI, al confiar su preciosa palabra al dorado estuche del micrófono, podrá sentir la plenitud del Pastor de almas que dirige personalmente sus ovejas.