En este doce de Octubre, no voy a hablar sobre la Hispanidad. En el mismo Religión en Libertad se ha hecho muy bien. Y yo no me privaré de hacerlo en otras ocasiones.
Hoy, mientras veo de fondo la multitudinaria ofrenda de flores a la Virgen, solo quiero "cantar" una jota en honor de Nuestra Sra. del Pilar, que creo que es síntesis de los sentimientos de muchos hispanos:
Sobre el altar dorado que las flores
convierten en jardín de primavera,
he visto esta mañana mis amores:
la Virgen del Pilar y la bandera.
No hay para la Señora otra guirnalda
con las orlas más puras y más bellas
que la bendita insignia roja y gualda
salpicada de rosas y de estrellas.
Virgen gloriosa del Pilar sagrado,
guarda a tus hijos de la secta extraña,
no nos apartes nunca de tu lado
y por tu amor de madre salva a España.