Año del Señor 2024
14 de enero
Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
TODO COMENZÓ POR UNO CHURROS CON CHOCOLATE
Ayer, a media tarde sonó la campana de la comunidad. Era un toque muy especial: repiquete y doce campanadas. Esa campana está colocada en el centro del monasterio, y nos sirve para llamarnos unas a otras; cada una tiene su toque, pero cuando tocan repiquete y doce, significa que llaman a toda la comunidad.
¿Qué habría sucedido? Enseguida, fuimos apareciendo todas por allí, para ver qué pasaba. Y… ¿qué era?
¡Chocolate con churros! Dos hermanas habían estado preparando merienda para todas, ¡y qué apetecible!
Lo pasamos genial, todas juntas merendando al calor… aquel detalle de amor y servicio de unas, había despertado en todas alegría, risas. Y los churros se convirtieron en uno de esos buenos ratos inesperados, que siempre unen más.
Mientras estábamos ahí reunidas, compartimos que aún no habíamos celebrado los Reyes Magos (porque aquel día casi toda la comunidad estaba con gripe). Así que la priora consiguió una audiencia con ellos para pedirles que vinieran hoy a nuestra comunidad. ¡Y ellos accedieron!
Otras animaron para que anoche expusiéramos el Santísimo y así comenzáramos la fiesta adorando al Señor, tal y como hicieron ellos. Otras salieron corriendo a prepararlo todo… en apenas unos minutos, todas estábamos dando lo mejor de nosotras mismas, para alegrar una fiesta que había pasado de largo para nosotras.
¡Y todo comenzó por un solo acto de amor! Y es que el amor despierta amor, saca lo mejor de los demás, es expansivo y se difunde.
Todo comienza por un solo acto de Amor, el que Cristo ha derramado por nosotros. Por eso, descubrir Su Amor en nuestra vida es lo que cambia todo. Nos transforma sacándonos de nuestras preocupaciones, y nos pone en marcha hacia los demás. Él se ocupa de lo nuestro para que nosotros podamos vivir confiados y así podamos amar y servir a todos.
Él ha sido el que nos ha amado primero. Y se entregó del todo… ojalá que a la medida de Su entrega, nosotros no vivamos ya para nosotros mismos, sino que nos dejemos transformar totalmente por Él y vivamos en el Amor.
Hoy el reto del amor es hacer un primer acto de amor. Da igual si es grande o pequeño, pues si un chocolate con churros pudo alegrar el corazón de una comunidad… cualquier acto de amor no deja indiferente al que lo recibe. Deja que la alegría de amar gratuitamente te vuelva a sorprender…
VIVE DE CRISTO
¡Feliz día!