- «Oye, Papa: Yo cuando cumplo años, tengo que hacer un propósito. ¿Tú, qué propósito has hecho?»
El Papa miró sonriente a la niña y le respondió:
- «Pues... que trataré de ser más bueno.»
- Para la plena realización humana y espiritual;
- Para gustar de la paz y de la felicidad interior (la sabiduría popular dice: «Sed buenos y seréis más felices», y la Sagrada Escritura: «La persona bondadosa se hace bien a sí misma») (Pr 13,2);
- Para identificarnos con Jesucristo;
- Para un apostolado mejor... hemos de hacer nuestras las palabras de San Pablo a los Colosenses al exhortarles: «Vivid revestidos de verdadera bondad...» (Col 3,12).
Los maestros espirituales suelen recomendar:
- Hemos de ser buenos... hemos de pasarnos de buenos... si queremos de verdad ser buenos.
- No hay medio más eficaz para hacerse bueno... que hacer el bien.
San Óscar (Anscario), monje sajón del siglo IX, que evangelizó los países escandinavos -Dinamarca y Suecia- decía:
- «Si yo fuese digno de ser escuchado por mi Señor, le pediría que me concediera un solo don: que hiciera de mí, por su gracia, una persona buena.»
Alimbau, J.M. (1998). Palabras para momentos difíciles. Barcelona: Ediciones STJ.