El día 12 de enero de este año, el Papa Francisco tuvo una homilía preciosa en Santa Marta, comentando el episodio entre Ana y Elí. (1 Sm 1,9-21)
La escena refleja perfectamente la angustia de tantas madres que esperan, con ilusión, el hijo que no llega.
Ana suplicaba, con amargura al Señor. Movía los labios pero no pronunciaba palabra. Elí, el sacerdote, hizo un juicio lamentable sobre ella. “Elí, el sacerdote, es No lo sé, pero no digo nada…> Cuando falta la piedad en el corazón, siempre se piensa mal y no se comprende a quien, en cambio, reza