Año del Señor 2015
Lerma,19 de octubre 
 
Hola, buenos días, hoy Inés nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
 
LA LUZ SE IMPONE.
 
            Al ir avanzando el otoño, cada vez oscurece antes y amanece más tarde. Ya hace un tiempo que están puestas las luces nuevas del claustro, ¡impresionante! Al fin es la técnica que avanza y que, con menos, hace más. 
Me explico: hasta ahora teníamos faroles, uno en el centro de cada lado del claustro, la verdad que valía bien para transitar de noche, pero era un poco pobre, y por mucho que poníamos bombillas de las más potentes y grandes, nada.
 
Al plantear la obra del claustro, era de ley renovar la iluminación; ciertamente, los cambios imponen al principio, y si encima te quieren poner lo último… pero es necesario arriesgar para avanzar y ¡adelante! Unos tubos de cristal blanco colgados cada dos arcos para que ilumine dentro y fuera y leds que no gastan nada, uf. Un poco psicodélico, pero ¡adelante! 
El siguiente paso era que se encendieran al pasar, sí, sin dar interruptores ¡vaya! O sea que es pisar en el claustro y la luz se impone, lo quieras o no y no puedes apagarla hasta que cumple su tiempo. 
 
¿Muy moderno? Bueno, pero nos va a explicar cada noche y cada mañana el modo de actuar de Cristo con nosotros. Él es la Luz del mundo y brilla sobre nosotros queramos o no; independientemente de si tocamos el interruptor; en cuanto percibe nuestra presencia, en cuanto nos acercamos a Él, ilumina todo sobre nosotros y no cesa de alumbrar hasta que cumple su misión, que es manifestarnos su Amor, cierto que has de acercarte, es decir, poner tu vida ante Él. 
 
            Yo he intentado esquivar los sensores, porque me sé el camino a oscuras, y me parecía demasiada luz para pasar un tramo a la cocina (por ejemplo), porque se encienden los cuatro claustros, pues nada, no lo he conseguido, siempre me pilla; a veces cuando estoy llegando al final ¡plas!  Entonces pienso: no, no esquives la luz, pues al final se enciende y habrás desaprovechado disfrutar del camino y lo bonito que se ve todo.  
 
Es así, Cristo nos busca en la luz y nos quiere hacer disfrutar de la propia realidad para que caminemos alegres en su Presencia. Las técnicas van y vienen, el claustro es el mismo, pero importa la Aventura que ocurre en tu corazón y es que Cristo te rodea y te sigue para hacerte pleno y feliz. 
 
El reto de hoy es claro: déjate iluminar, no esquives al Señor. 
 
VIVE DE CRSITO. 
http://dominicaslerma.es/
 
 
©Producciones es El- Vive de Cristo (Dominicas Lerma)
Prohibido cualquier reproducción para uso comercial. Solo se permite un uso para actividades de evangelización siempre que se publiquen sin ningún tipo de modificación.