Año del Señor 2015
Lerma,15 de octubre 
 
Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al Señor. Que pases un feliz día. 
 
NUEVO PELDAÑO
 
Ayer por la mañana salí a dar un paseíllo rápido por la huerta. Iba mirando el cielo, el precioso día, cuando, en el camino, vi una de las higueras. Se distinguía perfectamente un higo bien formado y maduro, y, gracias a la elasticidad de las ramas, pude tirar de ellas hasta bajarlas a mi altura para poder alcanzarlo. 
 
Miré de nuevo por si encontraba alguno más, pero ya no le quedaban. "Claro", pensé, "esta higuera es tan bajita, que otras han pasado por aquí y han hecho lo mismo que yo". 
 
Al volver del paseo, me di cuenta de que una de las higueras del Noviciado es tan alta, que no se alcanza fácilmente a coger los higos. Y estaba llena de ellos, y en su punto, ¡qué ilusión me hizo pensar en recoger unos cuantos para el postre de toda la Comunidad!
 
Miré mi reloj y calculé que aún me sobraban unos 10 minutos hasta la hora de clase, así que, sin pensarlo más, cojí una caja y una escalera bien alta, ¡y a recoger higos! 
 
Cuando ya llevaba unos pocos, caí en la cuenta de dónde estaba. Me había subido a una escalera de más de 8 peldaños, con el vértigo que tengo a las alturas. Como estaba entrelazada con las ramas de la higuera y rodeada de frondosos pinos, no me había parado a razonar la altura que había hasta el suelo. 
 
En ese momento miré hacia el cielo, y el Señor puso en mi corazón que la clave estaba en dejar de razonar, sólo confiar. 
 
Y es cierto, en ese pequeño acto de confianza el vértigo cesó, pues la confianza te llena de una fortaleza que no es tuya, se te da, es Cristo quien te fortalece, y puede al vértigo y al miedo.
 
Unos días subiremos a esas escaleras llenos de ilusión por un nuevo proyecto, y otros nos veremos allí arriba porque, a veces, el día a día te va obligando a subir un nuevo peldaño de confianza. 
 
Hoy, ¿qué te sube a esta escalera? ¿Qué te produce vértigo o, incluso, miedo? Éste es sólo un sencillo ejemplo, pero es muy real. 
 
Hoy te digo que puedes confiar en Cristo; no tienes que razonar más tus cosas, tan sólo mirarle a Él y dejar que te sorprenda. Verás cómo hace cosas en ti y a tu alrededor que jamás te habrías imaginado ver ante tus ojos. La confianza es dejar en manos de Otro lo que a ti te supera. Y Él hará que todo tu día esté lleno de Luz, de Vida, de Fortaleza. 
 
Hoy el reto del Amor es dejar de razonar, subir los peldaños de tu escalera con la certeza de que Cristo está contigo, no estás solo, y hoy lo puedes experimentar de nuevo. 
 
Se te abrirán un sinfín de posibilidades que quizás antes no veías.
 
VIVE DE CRISTO
http://dominicaslerma.es/ 
 
©Producciones es El- Vive de Cristo (Dominicas Lerma)
Prohibido cualquier reproducción para uso comercial. Solo se permite un uso para actividades de evangelización siempre que se publiquen sin ningún tipo de modificación.