Lerma,26 de septiembre
Hola, buenos días, hoy Inés nos lleva al Señor. Que pases un feliz día.
FLORES
En apenas 15 días he pasado por la experiencia de San Pablo: “Me da lo mismo vivir en la escasez que en la abundancia..." porque yo soy de Cristo y Él no tiene número, sino intensidad.
Para el cumpleaños de la Virgen llegaron flores en abundancia, que tuvimos puestas a sus pies. Providencialmente, el día 12 era la entrada de Celia. Los ramos que habían llegado estuvieron tan a punto, que pude transformarlos en centros. Sin nosotras pretenderlo, el Señor le puso la iglesia como de novia.
Diez días después renovó Sión la Profesión por un año. Es importante en el camino de la Consagración, pero se realiza en privado al finalizar uno de los actos litúrgicos. Ese día, en la iglesia no había más flores que las del Sagrario y unas pocas a los pies de la Virgen... pero mi corazón no consentía que al pie del altar no hubiera un centro, que estuviera vacío para esta renovación de nuestra hermana. No, no...
Como media hora antes, me lancé a la huerta, movida por el Señor, a buscar lo que encontrara, pues sabía que había poco o nada apropiado. Pero sí: encontré lo suficiente para poner 5 minutos antes un pequeño centro, que significó lo cotidiano, lo de cada día, lo que crece y adorna en silencio, la parte callada del carisma dominicano; es decir, el “Contemplar"... para luego poder predicar.
La verdad es que me sentí emocionada por este regalo. Ahora, cuatro días después, estoy impresionada por lo que se percibe en el pueblo: están preparando la boda de la hija de los de una gran floristería. Sólo puedo imaginar lo que será de flores, pues sé que será reflejo del amor incontrolable de unos padres hacia su hija.
Todas la flores (las vuestras, las mías, las de los novios...) acabarán estropeadas por el tiempo, pero habrán cumplido su preciosa misión de expresar el amor y cariño de nuestros corazones. Sólo importa una cosa: que Cristo esté y crezca, tanto en la escasez, como en la abundancia, porque sólo Él puede hacernos felices a todos. En Él crece el Amor que no se marchita, sino que dura para siempre.
Hoy el reto es que te abras a descubrir que, en cada detalle de tu vida, sea el que sea, hay amor verdadero y pongas tu ilusión por descubrirlo y dejarte penetrar.
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