La Iglesia cada vez es más consciente de la necesidad de formar formadores. En un reciente mensaje* el Papa Francisco insiste en que “todo buen formador debe recibir asimismo una sólida formación. Es necesario formar a los formadores”.
Los temas de estudio abarcan el ámbito teológico, pedagógico, pastoral y organizativo. Son los siguientes:
- Principios conductores del proceso formativo
- La madurez humana del seminarista
- Desarrollo intelectual y formación académica