Éste es el título de la novela que leí el pasado fin de semana.
Michael O’Brien ha escrito un libro que tiene mucho que ver con la situación actual de los católicos en España, y con nuestro futuro cercano. Escritor del delicioso “
Padre Elías”, “
El librero de Varsovia” y varios libros más aún sin editar en español,
Michael O´Brien es un novelista católico que únicamente intenta plasmar su pensamiento al mirar a nuestro mundo. Cualquiera que lea “
La última escapada” se verá reflejado en ella. Lo que “
El padre Elías” tiene de realidad actual, esta última novela parece que habla de mí, de cualquier persona con la que hablo cada día. Es muy fácil confundirla con la realidad cotidiana. Y una cosa muy importante es que, aunque en sus novelas parezca que el mundo y el demonio están contra los protagonistas, estos siempre persisten en su lucha. Es verdad que se quejan, que tienen sus luchas interiores, pero anuncian además de denunciar. No que quedan en la queja del llorón; tiran hacia delante con todas sus fuerzas. Al final, los “malos” que están todo el santo día metiéndonos caña, únicamente lo hacen porque no conocen a Cristo. No saben para quien trabajan, y si se encontrasen con el Señor empezarían inmediatamente a trabajar para Él, dejando todo lo demás. Es verdad que tenemos que quejarnos, gritar ante las injusticias, pero el Señor nos quiere también para que demos luz al mundo. Esa es nuestra función aquí, todo el tiempo que vivamos. Únicamente hago una recomendación a los que se propongan leer este libro: siéntense en un lugar cómodo y dispónganse a estar unas cuantas horas porque, una vez se empieza, no hay quién deje la lectura.
Eduardo Palanca