Cosa que hacía en 2005, en una nota que pidió fuera abierta un año después de su muerte, lo que, de acuerdo con su deseo póstumo se hizo en 2007. En dicha nota, y a partir de los profundos estudios que había llevado a la práctica a lo largo de su vida, siendo como era uno de los más respetados cabalistas, desvelaba el que, en su opinión, era el nombre del Mesías.
La frase “Él levantará a la gente y demostrará que Su Palabra y Su Ley son válidas” es la traducción española de “Yarim Ha’Am Veyojiaj Shedvaro Vetorato Omdim”, lo que da el acróstico (al que tan aficionados son los cabalistas) “YHVSVO”, que a su vez, sugiere la palabra “Yehoshua” o “Yeshua”… es decir, Jesús.
Ni la nota ni ningún escrito o relato del rabino explicaba cómo había llegado a semejante conclusión, más allá de la revelación hecha por él mismo de que el 4 de enero de 2003 se había encontrado en persona con el Mesías, un prodigio que, por otro lado, le habrían profetizado ocurriría dos de sus maestros muchos años antes.
Y bien, ¿de quién hablamos? El rabino en cuestión era Isaac Kaduri, (יצחק כדורי). Había nacido en Bagdad, en una familia de judíos sefardíes, hijo de un comerciante de especias, el Rabino Katchouri Diba ben Aziza. Aventajado estudiante de la prestigiosa escuela de estudios judíos Porat Yosef Yeshiva, dedica su entera vida a la lectura y estudio de la literatura clásica judía, el Talmud, la Cábala, traduciendo y analizando los más extraños manuscritos, que aprendía de memoria con su portentosa capacidad fotográfica, razón probable de que dejara tan escasa obra escrita. Kaduri funda su propia escuela la Nachalat Isaac Yeshiva.
A la muerte del Rabino Efraim Hakoken en 1989, Kaduri es elegido máxima autoridad de la Cábala y su carisma raya tan alto que se le atribuirán profecías, exorcismos, milagros y curaciones. Todo lo cual no es óbice para que se conduzca en todo momento con austeridad y sobriedad notables. Muerto en Jerusalén el 28 de enero de 2006 con no menos de 103 años -no se sabe a ciencia cierta cuando había nacido-, a su funeral acudirán nada menos que trescientas mil personas, entre los cuales el entonces presidente de Israel, Moshe Katsav, el Gran Rabino sefardí Shlomo Amar y el ex ministro de Exteriores Silvan Shalom.
Como es fácil de imaginar, la autenticidad de la nota es de lo más controvertida. De la página de los judíos mesiánicos (pinche aquí para conocer esta interesantísima rama del judaísmo que cree que Jesús es el Mesías), obtengo estas indicaciones al respecto:
“La revelación recibió escasa cobertura en los medios de comunicación israelíes. Pero en sitios web en hebreos como News First Class (NFC) y la página oficial de los seguidores del Rab Kaduri Kaduri.net mencionaron la nota del Mesías, insistiendo que era auténtica. El diario hebreo Maariv publicó una historia sobre la nota, pero lo describió como una falsificación […]
La revista Israel Today habló con dos de los discípulos de Kaduri en Jerusalem quienes admitieron que esta nota era auténtica, pero confusa para sus seguidores al mismo tiempo. “No tenemos idea de cómo el Rabino obtuvo el nombre del Mesías”, dijo uno de ellos. Así mismo, otros negaron completamente la posibilidad de que la nota fuera auténtica. El hijo de Kaduri, el Rabino David Kaduri dijo que en el tiempo en el que fue escrita la nota (Septiembre 2005), su padre estaba en condiciones en las que se le imposibilitaba escribir”.
Y sin más por hoy, deseo a todos Vds. que hagan mucho bien y que no reciban menos. Mañana nos vemos por aquí, si lo tienen Vds. a bien.
©L.A.
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