Montánchez es un municipio de la provincia de Cáceres. La Sierra de Montánchez se encuentra prácticamente en el centro de Extremadura. Asentado junto a un castillo de origen romano que aún se conserva, las primeras referencias sobre Montánchez datan de 1095, durante la invasión musulmana. Tras la Reconquista, se le dio título de villa con un término que abarcaba 14 municipios actuales, formando la Tierra de Montánchez. La villa estuvo vinculada históricamente a la Orden de Santiago.
La semana pasada el Obispo de Coria-Cáceres, Monseñor Francisco Cerro Chaves, presidió uno de los días de la novena de la Virgen del Prado, patrona de Talavera de la Reina. Cuando nos saludamos, tras hablar sobre las causas de los mártires, me regaló un libro que había traído. Se trata de la biografía del Beato Ángel Pérez Murillo, natural de Montánchez y mártir claretiano del grupo que fue asesinado en la estación de ferrocarril de Fernán Caballero (Ciudad Real)...
La brillante publicación, que vio la luz hace dos meses , ha sido preparada por Hilario Jiménez Gómez, Cronista Oficial de la Antigua y Leal Villa de Montánchez y del actual párroco, Luis Romero Sevilla.
Os la recomiendo. Supongo que los ejemplares podrán solicitarse en la parroquia de San Mateo de Montánchez (Cáceres).
Sus restos, junto a los de sus compañeros, se veneran en Sevilla
Hace año y medio, el 13 de febrero de 2013, en un sencillo y digno acto quedaron sepultados en la parroquia sevillana de San Antonio María Claret, los restos de los quince jóvenes que sufrieron martirio en 1936 en la estación ferroviaria de Fernán Caballero.
En un nicho y bajo un cuadro de la Virgen con los rostros de todos ellos, esperarían la llegada del mes de octubre, en que fueron beatificados en la ciudad de Tarragona.
Como puede verse en el enlace que os ofrecemos bajo estas líneas, el vicario general de la Archidiócesis de Sevilla, Teodoro León, y el párroco, José Márquez Valdés, presidieron la inhumación de los restos de estos jóvenes fusilados y enterrados en el cementerio de Fernán Caballero, desde donde fueron trasladados, al finalizar la Guerra Civil, al panteón de los Claretianos en Madrid. No acabó ahí el peregrinar de los restos, pues en 1950 se llevaron a la parroquia del Inmaculado Corazón de María, también en Madrid, regentada por los Misioneros Claretianos de la Provincia de Santiago, desde donde llegaron a Sevilla tras la petición cursada por el vicepostulador de la causa de canonización de este grupo de mártires.
http://www.pbase.com/rafacastellano/2013_parroquia_beatos
Magníficamente explicado por esta web:
http://elsayon.blogspot.com.es/2013/10/el-camino-que-han-seguido-los-restos-de.html
Jesús Aníbal Gómez, Gabriel Barriopedro Tejedor, Primitivo Berrocoso Bahíllo, Cándido Catalán Lasala, Tomás Cordero Cordero, Otilio del Amo Palomino, Abelardo García Palacios, Felipe González-Heredia Barahona, Antonio Lasa Vidaurreta, Ángel López Martínez, Claudio López Martínez, Antonio Orrego Fuentes, Melecio Pardo Llorente, Ángel Pérez Murillo y Vicente Robles Gómez son los nombres de los beatos, todos ellos, excepto Felipe González, seminaristas del Teologado que la Provincia Bética tenía en la pacense Zafra. Junto a ellos, también -como puede verse en las fotografías- el beato José Mª Ruiz Cano, formador de seminaristas, que ofreció su vida en Sigüenza.
Así que acudimos hoy a este nuevo lugar de veneración, la parroquia de San Antonio María Claret, (Av del Padre García Tejero, nº 8) casi centro geográfico de la Provincia Bética y templo con intensa actividad pastoral, donde reciben culto los restos de estos jóvenes mártires claretianos. Bajo estas líneas la imagen del Inmaculado Corazón de María, cuya talla aparece en su altar (ver margen derecho de la fotografía anterior).
En este enlace, encontraréis artículos sobre los mártires de Fernán Caballero
http://www.religionenlibertad.com/articulo.asp?idarticulo=33152
Y no os perdáis este otro: ¡qué gozo, cómo presumen los colombianos!
http://jesusanibalgomez.blogspot.com.es/