Debido a sus ingredientes constituye un valioso alimento y actúa como un eficaz medicamento universal desprovisto de efectos secundarios, veamos sus cualidades:
1. Acción antiinflamatoria y regenerativa: el caldo de huesos
de ternera repara el conjunto de las mucosas en caso de inflamaciones de estómago y de los intestinos y elimina, como escribe santa Hildegarda, dolores e inflamaciones : en la garganta, esófago y estómago. Es beneficioso en casos de colitis, enfermedad de Crohn, colon irritable y en el conocido como síndrome de inflamación intestinal con permeabilidad (Leaky gut syndrome)y también en el caso de hemorroides sangrantes.
2. Contra inflamaciones óseas y en la eliminación de dolores en caso de: artritis, poliartritis, artrosis, inflamación o debilidad del tejido conjuntivo, inflamación de la vejiga y dolores articulares.
3. El caldo de huesos de ternera, en casos de cáncer, corta las líneas de suministro de nutrientes con lo cual el tumor ya no puede alimentarse. Contiene anti-inhibidores de la angiogénesis; este anticancerígeno natural se deriva de una proteína que se encuentra en el cartílago: este inhibidor de la angiogénesis (AAFs) fue producido artificialmente y desarrollado como un medicamento que se utilizó en la terapia contra el cáncer y que en un año facturó, en EEUU, 4,5 millones de dólares. Sin embargo el medicamento en cuestión tiene efectos secundarios muy peligrosos y es muy polémico en EEUU.
4. Tomar regularmente el caldo, favorece un crecimiento óptimo de las uñas de manos y pies y en caso de caída de cabellos.
5. Promueve la circulación sanguínea mejorando los casos de manos y pies fríos.
En el post anterior dábamos la receta, estas son las instrucciones para preparar este caldo de pies de ternera:
Primero poner en agua hirviendo (unos minutos) los pies de ternera cortados para blanquearlos y después despreciar esa agua porque así, limpiamos de impurezas los pies de ternera y nos sale un caldo más claro.
A continuación poner en la olla 3 litros de agua fría con sal y añadir las rodajas de pies de ternera que acabamos de limpiar como hemos explicado antes. Encendemos el fuego y lentamente los hacemos hervir. Mientras lavar y cortar las verduras a trocitos y añadirlas, dejando hervir de 3 a 4 horas. Se debe ir quitando la espuma regularmente.
Se cuela y se guarda solo el caldo. Una vez frío se quita la grasa de la superficie. El caldo adquiere una consistencia gelatinosa al enfriarse. Para el uso semanal un vasito de yogur es suficiente y se conserva en la nevera. En el congelador se guarda varios meses. Se puede tomar solo como caldo (consomé) antes de las comidas o usarlo para hacer sopa con sémola, copos o pasta de espelta. Par adecortar se pueden añadir unas hojas de perejil fresco o un poco de ajete (ciboulette).
Si, una vez que hemos colado este primer caldo, despreciamos las verduras cocidas y volvemos a cocer otras 3 horas las mismas rodajas de pies de ternera con verduras y especias nuevas sale un caldo un poco menos espeso pero que es también eficaz.
Ahora solo nos queda probar y ver que realmente con santa Hildegarda podemos cumplir el adagio clásico “ que tu alimento sea tu medicina y tu medicina sea tu alimento”