Ahora que se vuelve a hablar de Teología de la Liberación, que se intenta rehabilitarla, me topo en un libro de Mariano Fazio con la referencia a un poema del libro Salmos (publicado por Endymión en 1990) escrito por el poeta, sacerdote y ministro sandinista Ernesto Cardenal, figura señera de este movimiento “teológico”. Sí, ya sé que hay sensibilidades diferentes dentro de la Teología de la Liberación, pero una “teología” que es capaz de generar palabras como éstas se retrata por sí misma. No creo que haga falta mucho más.

Les dejo con estos sensibles versos del rapsoda Cardenal. Disfruten de este Salmo liberacionista:

“Oh Dios, acaba con el statu quo

arranca los colmillos a los oligarcas

Que se escurran como el agua de los inodoros

se marchiten como la hierba bajo el herbicida

Ellos son los “gusanos” cuando llega la Revolución

No son células del cuerpo sino que son microbios

Abortos del hombre nuevo que hay que botar

Antes de que echen espinas que los arranque el tractor

El pueblo se divertirá los clubes exclusivos

tomará posesión de las empresas privadas

el justo se alegrará con los Tribunales Populares

Celebraremos en grandes plazas el aniversario de la Revolución

El Dios que existe es el de los proletarios.”