Cuando era algo más joven (qué mal sienta empezar de esta manera, pero es lo que hay en estas fechas del año), se ponía de moda todos los años, la llamada "canción del verano", que era casi siempre una melodía pegadiza, de nula consistencia cerebral, que servía para mover el esqueleto en chiringuitos playeros a lo largo y ancho de la costa española. Ahora se matiza el asunto con el "partido del verano", donde los equipos más cotizados intentan calentar motores a la vez que pasan "el cesto" por algún que otro país exótico (al menos futbolísticamente hablando). El caso es tener entretenidos al hispano medio, que vaga por la canícula veraniega con más pena que gloria.
Pero también hay otras maneras de descansar y disfrutar del mayor tiempo libre. Es el momento para hacer todas esas cosas para las que no tenemos tiempo durante el ajetreo del curso, para atacar ese libro clásico que se nos resiste, esa película larga que algo aporta, para ordenar la colección de sellos, armar por fin el rompecabezas que nos echaron los Reyes, o incluso aprovechar para poner en papel o en pantalla esas ideas que nos revuelan la cabeza.
La lectura es una manera excelente de descansar-aprendiendo. Ya sea en papel, en ebook o en tablet, leer un buen libro siempre es reconfortante. Para esas tardes encapotadas, para esas noches donde apetecer alargar un poco la vigilia, os facilito una lista de libros que pueden convertir el tedio veraniego en una ocasión de renovar nuestro interés literario o cultural.
Ahí va mi selección:
1. Gillian Bradshaw, El faro de Alejandría (estupenda novela ambientada en las últimas décadas del s.IV).
2. Saint Exupery, El principito (siempre es estimulante repensar las múltiples analogías que incluye el genial texto del escritor y aviador francés).
3. Nicolás Jouve, Células Madre (una obra sencilla y profunda a la vez sobre la base biológica de la experimentación con seres humanos y los problemas éticos que plantean).
4. María Calvo, Alteridad Sexual (una de las principales especialistas en esta temática, recorre la trayectoria histórica y las bases de la ideología de género, dejando al descubierto sus carencias y sesgos).
5. Ian Kerr, Newman, sin duda la mejor biografía escrita hasta el momento del genial pensador inglés, uno de los que han ejercido más influencia sobre el catolicismo anglosajón del s. XX.
Animo con ello. Ya me contareis si os gusta la selección.
La lectura es una manera excelente de descansar-aprendiendo. Ya sea en papel, en ebook o en tablet, leer un buen libro siempre es reconfortante. Para esas tardes encapotadas, para esas noches donde apetecer alargar un poco la vigilia, os facilito una lista de libros que pueden convertir el tedio veraniego en una ocasión de renovar nuestro interés literario o cultural.
Ahí va mi selección:
1. Gillian Bradshaw, El faro de Alejandría (estupenda novela ambientada en las últimas décadas del s.IV).
2. Saint Exupery, El principito (siempre es estimulante repensar las múltiples analogías que incluye el genial texto del escritor y aviador francés).
3. Nicolás Jouve, Células Madre (una obra sencilla y profunda a la vez sobre la base biológica de la experimentación con seres humanos y los problemas éticos que plantean).
4. María Calvo, Alteridad Sexual (una de las principales especialistas en esta temática, recorre la trayectoria histórica y las bases de la ideología de género, dejando al descubierto sus carencias y sesgos).
5. Ian Kerr, Newman, sin duda la mejor biografía escrita hasta el momento del genial pensador inglés, uno de los que han ejercido más influencia sobre el catolicismo anglosajón del s. XX.
Animo con ello. Ya me contareis si os gusta la selección.