Es una foto "histórica". Lo es porque es la segunda que Papa Francisco se saca en la modalidad selfie. La primera paso en una audiencia del Santo Padre a un grupo de scouts provenientes de la región italiana de Piacenza. En un momento, algunos de ellos se acercaron al Papa, dentro de la basílica de san Pedro. De pronto uno saca el teléfono móvil y, junto a otros amigos, le piden una foto al Santo Padre. Es así como nació el primer selfie, el primer autoretrato de un grupo de chicos con el Papa. El dueño del teléfono cargó la foto en Instagram, una red social de fotografías, y al poco tiempo se convirtió en un material viral no sólo en la red social donde originalmente se cargó la foto sino también migrando de su fuente inicial a millones de cuentas privadas y de medios en Facebook, Twitter, Google+, LinkedIn, etc.
Y la segunda ocasión ocurrió el miércoles 19 de marzo de 2013 al final de la audiencia general del Papa en la plaza de san Pedro del Vaticano (de hecho compartí la foto el mismo día en la fanpage de Facebook, con permiso de los esposos). La foto dio la vuelta al mundo e incluso la cadena Telemundo se interesó por lo que Zaira y Marco vivieron. Y así lo cuentan a las cámaras en este video:
Decía en otro artículo (véase De Benedicto XVI a Francisco: el papel positivo de las redes sociales en el cambio de percepción del Papa)que las redes sociales han jugado un papel determinante en la percepción positiva del Papa Francisco. Es evidente que este selfie y todo lo que se derivó a raíz de su publicación es una prueba más.