Esta semana, mientras leía un prestigioso diario español, que hacía un balance del año pasado, algo captó poderosamente mi atención: Un artículo destacaba el éxito de un gran empresario, cuyas tiendas habían alcanzado récords históricos de ventas y beneficios.

Lo que más me impactó no fue el artículo, sino la foto que acompañaba el texto: el empresario, rodeado de lujos, estaba de pie, con los brazos cruzados, pero su rostro  reflejaba una profunda tristeza. “Qué irónico”, pensé, “este hombre parece tenerlo todo, según los estándares del mundo, pero su mirada manifiesta un gran vacío”

La expresión "con una mano adelante y otra atrás" suele describir la extrema pobreza. Sugiere no tener nada, ni siquiera ropa que cubra el cuerpo. Sin embargo, tú y yo sabemos que la verdadera “riqueza” no se mide solo en dinero. Es evidente que este empresario, enfrenta otras “pobrezas”, que no le permiten ser feliz.

En el mundo, millones de personas sufren, día a día, distintas formas de pobreza: falta de educación, acceso a la salud, oportunidades culturales o comprender el sentido de la vida. Para muchos de ellos, nuestras entidades son su única esperanza. Estas personas viven su día a día con la sensación de tener una mano adelante y otra atrás, para enfrentar su pobreza espiritual o material. Y aquí está el mensaje clave: en tus manos está el poder ayudar a muchas personas, a superar su pobreza.

Tú tienes el poder de cambiar vidas

Sé que tu vocación implica ayudar a más personas a alcanzar la dignidad que merecen y a que encuentren la verdadera felicidad, de la mano, del que nunca falla: Jesucristo. Y que muchas veces puedes sentir que estás “arando en el desierto”. Pero te aseguro que cada esfuerzo que haces, tiene un impacto real. Cada vida que ayudas a transformar, por amor, justifica con creces tu sacrificio diario y tendrás tu recompensa en la vida eterna. Ahora imagina que puedes multiplicar ese impacto y ayudar a muchas más personas. ¿No crees que vale la pena intentarlo?

Tus planes y sueños para este año

Así como ese empresario estará planificando cómo superar sus récords de ventas y maximizar su riqueza este año, imagino que tú también tienes sueños y metas para mejorar tu vida y fortalecer tu entidad.

Por mi experiencia de 25 años formando y asesorando a cientos de entidades católicas como parroquias, fundaciones, diócesis o congregaciones religiosas, de España e Hispanoamérica, he podido comprobar que, muchas veces la “asignatura que tienen pendiente” es fortalecer sus finanzas. Pero también he visto que es posible cambiar esta realidad. Cualquier causa, con las estrategias y técnicas adecuadas puede, con pocos recursos, construir una base sólida de donantes y asegurar una economía sostenible.

De ti depende

No sé si en tu entidad eres el único “empujando” o si lideras un equipo. Lo que sí sé es esto: no puedes esperar resultados diferentes, haciendo lo mismo de siempre.

Te invito a que este año, tomes la decisión de formarte y prepárate para implementar en tu causa las técnicas modernas y profesionales, probadas en el mundo entero, para la recaudación de fondos. Al final, todo dependerá de ti y de tu determinación, disciplina y valentía para hacerlo.

Recuerda siempre: no estás solo

En esta tarea no estarás solo, pues sabes muy bien que si Dios te escogió para llevar esta labor, nunca te desamparará. La Providencia te ayudará en todos tus esfuerzos por sacar adelante tu entidad.

Pero también, como administrador prudente que eres, debes poner de tu parte y formarte para fortalecer la economía de tu entidad. Y nuestro instituto está aquí para ayudarte.

Hay varias formas como te podemos acompañar, para que implementes nuevas estrategias y técnicas en tu causa. Por una parte, te invito a leerte las entradas que publicamos en este blog. También te invito a que asistas a los webinar gratuitos, del Instituto de Fundraising Católico, sobre los consejos fundamentales para conseguir una base sólida de donantes.

Pero si este año quieres transformar por completo las finanzas de tu entidad o de un proyecto, te invitamos a matricularte en el Máster en Fundraising. Con una dedicación diaria promedio de una hora, a tu ritmo y sin interrumpir tus labores, podrás adquirir los conocimientos necesarios para implementar en tu causa, las técnicas modernas y profesionales de la recaudación de fondos.

Estamos otorgando becas hasta del 60% del precio y dando hasta 10 meses de plazo, para pagarlo, pero debido a que es una formación de consultoría personalizada y que, cada alumno, de mi mano, realizará la Planificación Estratégica de Fundraising, para su propia entidad, solo recibimos 10 estudiantes cada edición. No lo dudes, decídete este año, a ser una de esas personas que cambiarán el rumbo de su causa.

El futuro de muchas personas está en tus manos. Te invito a que te formes y prepares para poder ayudar a más personas a salir de su “pobreza” y que no enfrenten otro año “con una mano adelante y otra atrás”

Si quieres más información solo tienes que hacer clic aquí.