El último número de XL semanal, el suplemento dominical del grupo Vocento, incluye una entrevista al cardenal Carlos Amigo Vallejo, arzobispo emérito de Sevilla, en la que la redactora, aunque veterana periodista, emplea la táctica del reportero joven que quiere asombrar a la burguesía, para lo que, en lugar de hacerle preguntas de filósofo, se las hace de fiscal, tal vez porque es consciente de que es menos entretenido leer un ensayo que una sentencia.
La periodista no pregunta al cardenal por la cotidiana resurrección de Lázaro derivada de la conversión ni por la multiplicación del pan y el pez que apuntala la doctrina social de la Iglesia, sino por el catálogo completo de supuestos defectos del clero, especialmente del que lleva birreta. Lo que viene a ser como si en una entrevista a Einstein el reportero, en lugar de en la teoría de la relatividad, centrara el cuestionario en la baja nota que cuando cursaba secundaria obtuvo en geografía.