A mí no me parece mal que la tragedia se cuente como farsa, pero sí que la Sexta no advirtiera a determinados espectadores de que sintonizaban un programa de humor negro. Otros ya lo sabían. Entre otras cosas, porque el docudrama no vinculaba a la Iglesia con la asonada. En un reportaje serio le habría faltado tiempo para incluir a Suquía en la intentona. Quienes saben del tema tuvieron claro desde el principio que el documental de El Terrat estaba más relacionado con el pez llamado Wanda que con el elefante blanco.