Anonymous va de antisistema, pero, para serlo, le falta matricularse a la vez en la facultad de veterinaria y en el conservatorio a fin de sacarse el título de perro flauta, espécimen que tiene sus cosas, pero que al menos da la cara. En realidad Anonymous es puro sistema capitalista, pues se aprovecha de los hallazgos ajenos, que inventen ellos, para sacar rentabilidad. De ahí que malgasten su talento informático en ataques a una página de Iglesia en lugar de reunirse en un garaje para patentar Microsoft.