El propio Tarcisio Bertone, Secretario de Estado Vaticano con Benedicto XVI, reafirmó no hace mucho tiempo la postura oficial de la Iglesia, siendo ya Secretario de Estado en el Vaticano. Lo hizo a través de las páginas de un libro editado en Italia en el año 2007. El título del mismo es La última vidente de Fátima. Mis conversaciones con Sor Lucía. Se trata de una extensa entrevista realizada al cardenal Bertone por Giuseppe De Carli, vaticanista de amplio recorrido y reconocido prestigio. En la edición española (Ed. La Esfera de los Libros), la parte concerniente a Medjugorje la encontramos entre las páginas 134 y 138. Me he permitido traer a este alto en el camino de nuestra peregrinación escrita, algunas citas de la entrevista:
Giuseppe de Carli: A Medjugorje acuden anualmente casi dos millones de peregrinos; el asunto ha tenido fuertes complicaciones, como la actitud de los frailes de la parroquia, quienes, con frecuencia, se han encontrado enfrentados con las autoridades eclesiásticas locales; luego está el imponente número de ‘mensajes’ que, en estos años, la Virgen habría confiado a seis presuntos videntes. ‘Cuando un católico acude a ese santuario de buena fe, tiene derecho a una asistencia espiritual’, ha afirmado el ex portavoz del Vaticano, Joaquín Navarro-Valls.
Cardenal Tarcisio Betone: Las declaraciones del obispo de Mostar reflejan una opinión personal, no son el juicio oficial y definitivo de la Iglesia. Todo remite a la declaración de Zadar de los obispos de la ex Yugoslavia del 10 de abril de 1991, que deja la puerta abierta a futuras averiguaciones. La investigación debe, por lo tanto, seguir adelante. Mientras tanto, están permitidas las peregrinaciones privadas y que los fieles cuenten con acompañamiento pastoral. En definitiva, todos los peregrinos católicos pueden acudir a Medjugorje, lugar de culto mariano en el que es posible expresarse a través de todas las formas de la devoción.