Me ha parecido importante el artículo de Mario Palmaro publicado el pasado mes de octubre en la revista italiana Il Timone y que ahora reproduce Riposte Catholique. Escribe Palmaro a raíz de la aprobación en Italia de una ley contra la homofobia, un paso que no tiene nada de inofensivo y que supone un avance en el escenario de totalitarismo soft en que vivimos, que "en realidad nadie sabe definirla con precisión, pues la homofobia es una invención ideológica. Se trata de una idea sacada del código penal soviético, que permitirá al ministerio público y a los jueces el perseguir los comportamientos mas diversos, constituyendo así la mas grotesca victoria de la jurisprudencia creativa".
Las consecuencias son variadas e irán apareciendo con el paso del tiempo (escuelas, grupos de catequesis, escritores y periodistas serán probablemente los primeros en verse directamente afectados). Pero el tema nos afecta a todos: argumenta Palmaro que "la homofobia certifica, a través de la judicialización, la destrucción de la identidad sexual natural, transformándola en una elección individual y arbitraria".
Magnifica y muy ilustrativa es la lista de los diez pasos a través de los que hemos llegado a la actual situación (y que nosotros, en España, hemos recorrido antes que en Italia). Desde el silencio sobre la naturaleza de la sexualidad humana hasta el último estadio (por ahora) de la adopción por parte de parejas del mismo sexo.
Por cierto, Palmaro, sin perder un ápice de rigor, no abandona el sentido del humor, como cuando se extraña, a propósito del noveno mandamiento, de que los católicos no estemos continuamente recalcando que no tenemos nada en contra de los adúlteros. Se agradece.