Pensamientos para noviembre, en el corazón del otoño. Hacía 20 años que un Papa no visitaba el cementerio más emblemático de Roma. Y el Papa Francisco, el dia uno, festividad de Todos los Santos, recuperó la tradición que Juan Pablo II cumplió por última vez en 1993, celebrando una misa ante los miles de fieles que se agolpaban para verle. El Pontífice aprovechó el momento del día en que se encontraba, -estaba a punto de ponerse el sol-, para pedir a los católicos que pensasen cómo será "el ocaso de sus vidas". "Todos nosotros tendremos un ocaso, ¡todos!", recordó, invitando a continuación a preguntarse por la disposición con que se afrontará el momento de la muerte. "¿Será con esperanza? ¿Con la alegría de ser acogidos por el Señor? Este es un pensamiento cristiano que nos da paz". Junto a las palabras del Papa Francisco, aquellas "Tres certezas" de Benedicto XVI, que quiso exponer en la Eucaristía más íntima, con las personas cercanas a él, cuando cumplió 85 años: "Me encuentro en el último tramo de mi vida y no sé lo que me espera. Pero...

Primera certeza: "Sé que la luz de Dios existe".
Segunda certeza: "Sé que Jesucristo ha resucitado".
Tercera certeza: "Sé que su luz es más fuerte que cualquier oscuridad; que la bondad de Dios es más fuerte que todo el mal de este mundo. Y esto me ayuda a avanzar con seguridad. Esto nos ayuda a nosotros a seguir adelante y, en esta hora, doy las gracias de corazón a todos los que continuamente me hacen percibir el "sí" de Dios, a través de su fe".

Hermosos pensamientos para este mes de noviembre, mes de cipreses y crisantemos, de entrañables recuerdos de nuestros seres más queridos, que nos han precedido. El Papa Francisco nos ha animado a los católicos "a tener el corazón anclado allí donde están nuestros antepasados, donde están los santos, donde está Jesús y Dios".