No estaría de más aclarar a esta gente que la Iglesia no homenajea a sus héroes, sino a sus mártires, para que deje así de asociar la quema de un templo en Madrid con la toma de un alcázar en Toledo. Equiparar al mártir con el soldado es vincular a la Virgen del Pilar con Belchite, pero la progresía cuenta con las pocas ganas de discernir del común de los españoles para que triunfe la tesis maniquea de que una de las dos Españas honra a sus muertos mientras que la otra los busca.