Toñi es una chica, ya muy adulta, que durante mucho tiempo padecía una enfermedad progresiva que la había dejado imposibilitada. Los músculos, los huesos, y toda su persona, estaban entrando en un camino sin retorno. Varias operaciones de injerto de hueso en la rodilla y otros lugares. El trabajo que tenía lo tuvo que dejar porque ella ya iba en silla de ruedas. Si en enero no se incorporaba la despedían definitivamente, con el problema económico que ello suponía teniendo a su marido en paro. Era hasta el momento una católica sin demasiados arranques y entusiasmos.

                Había venido de Miami la H. María de los Ángeles, de la Orden de las Vírgenes Consagradas (Fundadora de los Cenáculos Contemplativos de la Divina Misericordia), para intervenir en el I Simposio Nacional de la Divina Misericordia que se celebraría en mi Parroquia. Toñi quiso conocerla para pedirle que rogara a Dios por ella. A la H. María de los Ángeles Dios le ha concedido el don de sanación física y espiritual. Le impuso las manos y estuvo rezando por ella, que  estaba en su silla de ruedas, y le dijo que pronto sanaría. La sorpresa fue al día siguiente, en la primera semana del  presente mes de octubre, cuando ella se despierta y siente el impulso de valerse por sí misma, de caminar. Y así fue. Toñi comenzó a caminar sin ayuda, como en sus buenos tiempos. Estaba llena de alegría. Su marido no lo podía creer, ni su familia. Fue al médico y no encontraba una explicación científica a ese cambio tan radical.

                Ya en el Simposio, al terminar uno de los actos programados, invito a Toñi a que de su testimonio, estando presente  la H. María de los Ángeles.  La que llevaba tanto tiempo enferma y sufriendo sale al centro de la iglesia con sus muletas y dije: “Gracias a Dios estas muletas ya no me hacen falta” y las deja en el suelo. Y comienza a caminar, a dar saltos de alegría, se baila casi una jota, se pone de rodillas, cosa que no podía hacer desde hacía mucho tiempo. Se tiende boca abajo en el suelo con los brazos extendidos, postura que le era imposible hacer antes. Se levanta ella sola y sigue dando saltos de alegría. La H. María de los Ángeles, acurrucada en su sitio daba gracias a Dios que hace tales maravillas.

                Los cuatrocientos asistentes al Simposio no daban crédito a lo que veían, y rodaron las lágrimas por casi todas las mejillas.  Con un gran aplauso se premió a Toñi y se agradeció a Dios estas maravillas que El hace cuando hay fe.

                Los milagros existen. Lo hemos visto con nuestros propios ojos, aunque no es necesario ver para creer.

Juan García Inza

Rector del Santuario de la Divina Misericordia en Murcia 

NOTA: Un lector, cuyo comentario inluimos en su lugar correspondiente,  me solicita que le diga que clase  de enfermedad padecía esta persona, por si acasop tuviera explicación razonable su curación. He solicitado informacióna la familia, y esta es la explicación que me han dado:

 Maria Antonia Sanz Peñalver (Toñy)

Sufre de Fibromialgia.
Lleva mas de 10 años sufriendo dolores casi siempre muy fuertes y pocas veces leves.
Desde que se levanta hasta que se acuesta. De lunes a viernes, de enero a diciembre.
Casi todas las noches, sobre todo desde que le operaron, se despierta por el dolor y no consigue dormir mas de dos horas seguidas pese a la medicación. Tiene el síndrome de piernas inquietas.
Le duelen:
las mandíbulas de tanto apretarlas cuando consigue dormir algo
las rodillas ( por artrosis avanzada, condropatia de grado 4 y debido a la desaparición del cartílago tiene rozadura con los huesos)
muñecas por túnel carpiano ,
tobillos debido a múltiples esguinces,
espalda por dos hernias,
cuello por rectificación y por una bola que no recuerda el nombre.
Codo por epicondilitis,
cadera por repetidas bursitis trocanteritis, taquicardias, fibromialgia.....

La operaron el 7 de agosto de una osteotomía, es decir, que la han cortado un trozo de hueso de la tibia para alinearlo con la rodilla que la han tenido que girar y sujetar todo esto con una placa y tornillos.
Antes de la operación le dijo el médico que era una operación compleja y que seguramente no podrían quitarle los dolores, pero tal vez sí las muletas y por lo menos mejoraría de la espalda y el resto del cuerpo. Le dijo que tenia que tener paciencia pues son operaciones largas de rehabilitar debido a que si no se hace bien puede que haya rotura de hueso y a empezar de nuevo

Ha estado seis semanas sin poder apoyar la pierna operada, y las últimas tres semanas apoyándola pero sin hacer fuerza y yendo muy despacio y con dolores.
Desde que le operaron han ido en aumento los dolores, el cansancio, el sueño descontrolado y disminuyendo sus fuerzas, alegrías e ilusiones, pues no solo ha empeorado sino que no ve el memento de volver al trabajo, del cual está de baja por incapacidad y se ha quedado con la mitad del sueldo (unos 400€)
Se le infectaron las grapas y se las quitaron mas tarde de lo habitual, por lo que se ha quedado pegada al hueso y ahora hay que estar a base de masajes (nada placenteros) para intentar separarla .
Está en la unidad del dolor, y toma bastante medicación, entre ella unos parches que llevan un poco de morfina y están catalogados de estupefacientes
Estas tres últimas semanas se le agravaron los dolores sobre todo en la espalda y su marido tenia que echarle crema todas las mañanas antes de levantarse y ayudarle a incorporarse, pues ella sola no podía hacerlo.

De todos modos el médico le mandó unas pastillas que también son opiáceos para ver si le calmaban un poco el dolor y lograba descansar.
Llegar con las muletas hasta la cocina era un suplicio y hasta que no pasaba una hora mas o menos desde que se levantaba y le hacia efecto la medicación no desaparecía esa rigidez, y apenas valía para prepararse ni un vaso de leche.

La semana pasada, el 31 de Septiembre fue al médico para decirle que ya no soportaba mas tantos dolores, ni dormir tan pocas horas, ni el no poder controlar las piernas, y que por favor si le podía ayudar en algo, pues en Enero le hacen revisión del expediente y según fuera recuperación podría volver a trabajar, siempre que no pasase de Enero, tiempo máximo que le permite la Ley. De no poder tarbajar pasaría al INEM y eso ya es sentenciarle a no trabajar ya de por vida
El médico que le operó le dijo que no se pusiera metas y que no se ilusionara pues esta recuperación es lenta y si la rehabilitación no se hace como es debido y el resultado puede que no sea el esperado y se retroceda.

Al día siguiente, y en esta lastimosa situación, 1 de Octubre, es cuando Mª de los Ángeles Expósito, la religiosa consagrada de Miami habla con ella y esa misma noche nota el cambio radical.

Primero: Duerme toda la noche, excepto un momento que se levanta al baño y al volver a la cama se ha dado cuenta que lo ha hecho sin muletas.
Segundo: El marido al ir a darle crema para los dolores como todos los días le dice ella que no hace falta, que no le duele tanto, le dice a él.
Tercero: No le dice al marido lo extraña que se siente y cuando él se va a trabajar, suelta las muletas y observa que puede andar con soltura, salta, brinca y emocionada se lo dice a su hija, la cual no da crédito.
Le han desaparecido los dolores intensos y desesperados que tenía desde el día anterior hasta años atrás.
Ya anda regularmente cuando el día anterior y dias atrás desde su operación no lo podía hacer, sino solo ayudada con muletas y apoyando ligeramente en el suelo.

Ha ido al médico que la trata regularmente y solo ha podido decir, nada más verla ya recuperada, que puede tratarse de algo psicológico, y que otra explicación no encuentra.

Ella ha querido dejar la silla de ruedas y las muletas pero la familia y el médico ha aconsejado esperar hasta ver las nuevas placas que le van a realizar. Pues da miedo verla saltar , andar y brincar temiendo que se dañe por imprudencia.

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INFORMACIÓN SOBRE LA FIBROMIALGIA

www.cadenaser.com/espana/articulo/duele-todo/csrcsrpor/20120512csrcsrnac_5/Tes

Un saludo