Me llega un correo en el que habla un tal Alen Foper, un iluminado chileno, que pretende ser el nuevo señor del mundo. El se pone por encima de la Iglesia, de las sagradas escrituras, y del mismo Jesucristo. Invita a una marcha mundial sobre el Vaticano, al grito de “¡La Ciudad del Vaticano para el pueblo!”. Se considera el llamado a establecer un nuevo orden mundial, que será dirigido por él desde le Vaticano, y tendrá a sus órdenes a la ONU como provincias de este Estado Mundial.

                He dudado de traer al blog las “teorías” de este señor por considerarlas disparatadas, pero como siempre hay crédulos que se tragan todo, y al haberse difundido este “proyecto populista” por toda la Red, puede crear confusión. He investigado todo y aquí expongo, sucintamente, los sueños disparatados de este iluminado.

              

  Alen Foper llama a sus teorías MI EVANGELIO. Pero, ¿quién este Señor? Es un chileno, que se proclama el “profeta” de los nuevos tiempos, y que publica en su libro de 78 páginas lo que el llama “Mi Evangelio”. Estas son palabras suyas:

Le invito a que lean mi mensaje, espero que lo lean todo y con calma

para sacar conclusiones acerca del por qué digo que el Evangelio soy yo. He

escrito el libro, porque veo el futuro humano de antemano, que el reino de los

cielos está presente, y todo lo que sucederá hasta el último día. No solo eso,

también conozco el secreto que esconde la verdadera finalidad de la existencia humana.

Pero, ¿quien es este hombre?  Como comenta Raul Miguel en  http://sursumcordablog.blogspot.com.es/2010/06/alen-fopel-mi-evangelio.html, en  su relato autobiográfico vemos que se crió en un ambiente católico relajado y que luego incursionó con los Testigos de Jehová (mezcla fatal). Comienza así a buscar en la Biblia el cumplimiento de los acontecimientos mundiales... pero él no buscó con humildad y paciencia, siguiendo el ejemplo de los Padres Apostólicos, del Magisterio Antiguo y de los Santos Doctores, no,  el buscó en las Sagradas Escrituras una verdad que lo hiciera verdadero a él mismo, alejándose de Dios y de la Santa Madre Iglesia. Sigamos, a los 20 años tiene un "sueño" que le anuncia que será un hombre rico y además un gran líder... esto fue producto de la interpretación de su padre como la que unos años después le hiciera un amigo:

a fines de ´83, a un amigo que le atraía todo lo que es misterioso, le conté del sueño a él, junto a algunos presentes que me estaban escuchando, me sorprendió por la rápida respuesta y con mucha seguridad, me dijo "tú vas a ser un líder, y toda esta gente será tu iglesia". Esta era la respuesta que me satisfizo por primera vez, que el significado es espiritual. Sin embargo, el verdadero alcance de estas palabras me confirmaron años después, que el tipo de liderazgo era universal. A esta experiencia onírica vivida, lo consideré siempre profético o predictivo, desde el mismo día, por la respuesta de mi padre ese mismo día, que me hizo ver que sería alguien en el futuro. Ahora después de más de 30 años, ya lo tengo claro cada uno de los simbolismos de este sueño, fueron anuncios anticipados sobre hechos de mi vida desde ese momento a mi misión futura.

 Otro acontecimiento se sumó a su "despertar", la visita de Juan Pablo II a Chile, por eso en el año 1987 el "descubrió" que debía ocupar el Vaticano, sentándose en la Silla de Pedro ¡Nada menos! Esto lo podrá conseguir luego de su propia muerte, resurrección y la correspondiente entronización de parte de las autoridades de las Naciones Unidas y el Papa en un "cambio de mando":

Seré coronado como Rey, Sacerdote y Profeta, en representación de toda la

Humanidad. En este acto encarnará mi misión y mi autoridad universal. De esta

manera, seré escogido para gobernar sobre ellos conforme a los mandatos del

Concilio (Deu. 17:15:20). En ese entonces, seré consagrado como el verdadero San

Pedro, que obtendré los títulos propios de Jefe de la Humanidad, Pastor

Universal, el Sumo Pontífice, Padre de los reyes, Gobernador de la tierra.

 

Sin duda se trata de un hombre un poco enfermo, con dotes de persuasión  para engañar a la gente que quiera seguirle en su propia locura y que de paso, podrá aprovechar para hacer algo de dinero... un "loco más" pero que aún loco, tendrá quien lo siga.

                Por tanto, no hace falta que nadie se congregue en la plaza del Vaticano el próximo día 15 como primera etapa de la marcha mundial para tomar posesión de la Sede de Pedro. Esta Sede será ocupada por el nuevo Papa, que en nombre de Dios seguirá intentando extender el Reino de Dios, Reino de Paz, de unidad, de libertad, de amor... por todo el mundo.

Los iluminados se apagarán para siempre al menor soplo de la Verdad.