La Alianza Evangélica Mundial ha informado que las autoridades saudíes detuvieron el 8 de febrero a 53 etíopes cristianos, en su mayoría mujeres, que asistían a un culto religioso en una casa privada, alquilada por un creyente etíope en Dammam, la capital de la provincia oriental de Arabia Saudita, según las fuentes de la Comisión de Libertad Religiosa de la Alianza Evangélica Mundial.
Los cristianos - 46 mujeres y seis hombres, entre ellos tres líderes de la iglesia - fueron detenidos la mañana del viernes pasado. Los tres líderes de la iglesia - dos de ellos mujeres – permanecieron detenidos por mandato de un tribunal islámico en Dammam, el mismo día en que las autoridades les acusaron de proselitismo y de convertir musulmanes al cristianismo.
En principio, las autoridades pueden liberar a dos de los cristianos etíopes que están en posesión de permisos de residencia. El resto se espera que sean deportados.
SIN RESPETO POR LA LIBERTAD INDIVIDUAL
Dammam es un lugar importante en el negocio de petróleo y gas natural, así como todo el comercio en las zonas orientales del reino. Es un gran área metropolitana, industrial y un puerto importante. Sin embargo, la libertad religiosa no se concede a los numerosos visitantes o expatriados en la región, al igual que en otras partes de la nación. Una niña saudí que abrazó el cristianismo tuvo que huir de Dammam en septiembre de 2012 a Suecia, donde se le concedió asilo, según el periódico Al-Yaum.
No se trata de un caso aislado en el país árabe. En diciembre de 2011 las autoridades saudíes detuvieron a 35 cristianos de Etiopía, 29 de ellos mujeres, por “actividades ilícitas”, después de que la policía irrumpiera en una reunión de oración privada en Jeddah. Los detenidos fueron sometidos a cacheos arbitrarios, según la organización Human Rights Watch.
“Instamos a las autoridades saudíes a que traten a todos los detenidos con dignidad y sean liberados inmediatamente, ya que al parecer no hay pruebas de ningún delito contra ellos”, expresó Godfrey Yogarajah, director ejecutivo de la Comisión. “El arresto de los creyentes durante sus reuniones de adoración va en contra del espíritu de promoción de diálogo interreligioso del que Arabia Saudita hace gala en los foros internacionales” Uno de estos foros es el KAICIID, en el que España figura también como socio fundador.
“Más de 10 años después del 11-S, el gobierno saudí sigue sin aplicar una serie de reformas prometidas relacionadas con la promoción de la libertad de pensamiento, conciencia y religión o creencia”, explicaba la Comisión sobre Libertad Religiosa de Estados Unidos en su informe anual.
“El gobierno saudí insiste en la prohibición de todas las formas de expresión religiosa públicas - excepto las procedentes delIislam sunita -. Prohíbe iglesias, sinagogas, templos y otros lugares de culto no musulmanes, utiliza en sus escuelas y su producción de literatura oficial para seguir impulsando la intolerancia y la incitación a la violencia, y periódicamente interfiere con la práctica religiosa privada”, dijo el informe.