Se ha rizado el rizo. Mira que era difícil la cosa, pero se ha logrado. Era como hacer una tortilla de patatas sin patatas. En fin, ahí lo tienen. Ellos los listos, los progres, los agnósticos, los influyentes...se han sacado de la manga nada menos que una navidad sin Dios.

Como en un juego de prestidigitación han escamoteado habilísimamente al protagonista del invento y éste se ha volatizado.

La Navidad de siempre pivotaba sobre el nacimiento en Belén del Hijo de Dios. Pues bien, ahora por arte de biribirloque se sigue hablando de la Navidad, sin mencionar para nada al personaje principal, Jesús,.Jesucristo. Sencillamente se le ignora, se le camufla, se le cambia o se le trasviste por otros personaje foráneos o flamantes sucedáneos. ¡ Qué imaginación¡.

He tenido en mis manos una lujosa revista sobre la Navidad .Más de 150 páginas a todo color, en papel satinado, cuché, con toda clase de fotos y motivos para incitar al consumismo. Pues bien, ni una sola referencia a Dios, al misterio de su Nacimiento. Un verdadero record.

Dentro de poco sobrarán palabras obsoletas como paz, amor, solidaridad, fraternidad..Las suplirán otras más actuales: guerras, egoísmo, sexo, consumismo etc..Nos han estafado sin remedio.

MIGUEL RIVILLA SAN MARTIN