Human Rights Watch –HRW- acusó el jueves a la oposición siria de la utilización de niños para servir como combatientes, guardias y vigías en el brutal conflicto con las fuerzas del régimen baasista (nacional-panarabista socialista) sirio.
Los niños de 14 años han servido en al menos tres brigadas de la oposición, el transporte de armas y suministros y actuando como vigías, y chicos de 16 años han estado en puestos de combate contra las fuerzas del gobierno.
HRW entrevistó a cinco niños entre 14 y 16 años que dijeron haber estado combatiendo con la oposición armada.
Para el islamismo los niños son carne de cañón, como combatientes, como escudos humanos, como desactivadotes de minas, con la promesa que si caen en combate irán al paraíso de Alá y se casarán con 72 vírgenes de ojazos negros.
Los defensores de los niños en Occidente no se manifiestan contra los abusos criminales de los islamistas, y los izquierdistas ignoran las atrocidades que perpetran los islamonazis.
NOTAS
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