A todos nos gusta la luz.

Aborrecemos la oscuridad.

Estamos incómodos cuando no vemos.
Esto en la vida terrena.

Pero en la vida espiritual ocurre esto con mucha más intensidad.

Tener claras las ideas sobre el sentido de la vida y tener esperanza en el más allá de la muerte da una paz espiritual que supera todo bienestar terreno.

JORGE LORING, S.I.