Hace poco la liberal Aguirre premiaba a Torrente, como con anterioridad lo había hecho con la actriz paradigmática de la movida (y lo que ésta supone como cosmovisión), con una de las máximas condecoraciones de la CAM en el Dos de Mayo.

Es decir le había otorgado en el día más significativo el máximo reconocimiento que podía dar desde su capacidad legal como presidenta de la Comunidad de Madrid

Ahora es Botella, elegida sucesora del Alcade de la pildora abortiva por la burocracia de PP, la que premia, en el día más significativo de la ciudad, a un enemigo de la Iglesia con la máxima condecoración de Madrid, la capital de España.






La Alcaldesa del PP ha concedido  la Medalla de Oro de Madrid, en el acto institucional con motivo de la fiesta de San Isidro, a Amenabar, director de, entre otras,  ´Mar adentro´ (2004),  y ´Ágora´ (2009), ejemplos de su trabajo donde se defiende la cultura de la muerte y se ataca a la Iglesia con mentiras históricas.

Amenabar, como no, y de ello presume como muestra la noticia, es militante progay activo, lo cual da muchos puntos para ser valorado por los aparatos partidistas del PP.

Y, no hay más que acudir a la hemeroteca para confirmarlo, es un enemigo declarado del catolicismo.

Los votantes católicos de Madrid que apoyaron al partido abortista de derechas son, en su parte alícuota, los cómplices necesarios para que Botella haya podido, en su condición de alcaldesa, comprometer, a través del premio, a la ciudad de Madrid con la reingenieria social prohomosexualista, eutanásica y anticristiana
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Ana Botella es la encarnación del modelo humano y político del PP

En la misma jornada y sin problemas morales:

Imagenes de la comunión de Ana Botella