Kadar, que regularmente comparte su fe con los musulmanes en la ciudad de Orán, estaba hablando de su fe en Cristo con un hombre en un patio de comidas al aire libre en mayo pasado, cuando el hombre se enfureció y acusó a Kadar de insultar a Muhammad. La policía arrestó a Kadar y encontró una gran cantidad de materiales cristianos en su apartamento.
Esta sentencia manifiesta la intransigencia religiosa imperante en el mundo musulmán hacia los que no- musulmanes, el sufrimiento de los cristianos y judíos, únicas minorías “toleradas”, así como también la inseguridad religiosa y la debilidad ideológica de los dirigentes musulmanes ante personas de otro credo, y la desconfianza de estos líderes hacia su propia población que piensan que un cristiano les tambalea la fe, más cuando los seguidores de Muhammad afirman vehementemente que el Islam es la religión única y verdadera, y que el resto es falso.
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