El 30 de septiembre de 2011, poco después de la oración musulmana de la tarde, aproximadamente tres mil fieles musulmanes incendiaron y demolieron la iglesia Gerges Mar en la aldea de El Marenab de Asuán. La turba también arrasó cuatro casas cerca del edificio de la iglesia y dos negocios, todos los propietarios cristianos.
Los imanes de más de veinte mezquita animaron a los devotos musulmanes a destruir e incendiar la iglesia cristiana, demoler las casas de los cristianos y saquear sus propiedades, según testimonios cristianos.
Aldeanos musulmanes afirmaron que miembros cristianos de la iglesia estaban convirtiendo una casa de huéspedes en una iglesia. Los ciudadanos musulmanes también estaban molestos por los símbolos de la fe cristiana, tales como cruces, se podían ver desde el exterior del edificio de la iglesia.
El sacerdote cristiano Makarious Bolous tuvo la “desfachatez”, islámicamente hablando, de reconstruir la iglesia. La policía y autoridades egipcias conocen perfectamente a los imanes y creyentes musulmanes que incendiaron el templo cristiano, pero ninguno de estos ha sido detenido ni juzgado.
El sacerdote cristiano transgredió la ley que ha imperado siempre en el mundo musulmán, que prohíbe construir iglesias o sinagogas, y en caso de desperfectos en estos centros de culto cristiano y judío, se tiene que pedir permiso al gobierno o a las máximas autoridades del país, lo que normalmente es denegado.
“En Egipto un porcentaje significativo de proyectos de construcción se hacen sin permisos e incluso cuando la expedición de permisos, el cumplimiento de sus estipulaciones es casual y la aplicación es laxa. El pueblo donde el edificio de la iglesia una vez estuvo rodeado de casas que tienen dos o tres pisos adicionales construidos fuera de las especificaciones permitidas y por otros que fueron construidos sin permiso en absoluto”, declaró el sacerdote cristiano Bolous.
El tribunal de Primera Instancia ha fallado contra el sacerdote cristiano y le ha condenado a seis meses de cárcel al sacerdote por reconstruir su iglesia, que fue destruida por islamistas, y también una multa de egipcias (50 $ USA)
Los judíos y cristianos son dhimmies en el mundo musulmán, sus tierras y posesiones han de pasar definitivamente al Islam, y los países que fueron sometidos a del Islam tienen que volver a reislamizarse y los “sionistas y cruzados” expulsados de ellas, como Alá manda, y podemos leer en el Corán.
Reconstruir una iglesia en donde se hallaba, destruida por los musulmanes, como reconstruir un país, Israel, en donde siempre hubo judíos, como en Egipto hubo cristianos antes que musulmanes, es un delito, una afrenta, un insulto al Islam, según los islamistas. “Si los musulmanes ocupan y destruyen una iglesia, un país, que se jod.. los cristianos; y si los musulmanes ocuparon el país de los judíos, que los judíos se jod..” Este el pensamiento que inspira las acciones de los islamistas.
Condenar al dhimmi sacerdote cristiano por reconstruir su iglesia, y dar inmunidad a los incendiarios y destructores musulmanes es correcto según la ley musulmana, el Shari´a.
Estos aldeanos no son unos bárbaros, ni locos, ya que sus imanes les inculcan estas ideas que leen en el Corán, sus imanes les alientan a incendiar y destruir las iglesias:
¡Qué desfachatez tienen esos cristianos y judíos, y que inmorales que son! Esto es lo que piensan estos aldeanos musulmanes que incendiaron la iglesia, y destruir una iglesia, destruir Israel es lo que quiere Alá.
Este pensamiento totalitario, este adoctrinamiento, es el de los salafistas, y entre los musulmanes que viven en España, según los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, corresponden entre una cuarta y tercera parte de los musulmanes que moran en España, número que crece bajo la influencia de los imanes subvencionados por Arabia Saudita o Irán.
NOTAS
http://www.compassdirect.org/english/country/egypt/article_1436277.html