Fuerzas de seguridad iraquíes han detenido a una mujer cuyo novio la convenció para enviar a su hijo a una misión islamikaze.
El muy devoto musulmán de 53 años de edad Hamid Alwan, persuadió a la viuda sunnita Suad al-Obaidi, de 47 años, que sacrificase a Alá a su hijo de 9 años de edad, Murtada Latif, para que se inmolase explotando una mezquita chiíta en Jales, al norte de Bagdad, hace años.
El ferviente musulmán Hamid Alwan "llevó juntos a la madre y al hijo en coche hacia la mezquita chiíta, pero en el camino, la madre se puso a llorar por su hijo. Él sacó del coche a la madre, y se quedó con el niño, cargado con un cinturón de explosivos, y lo trasladó a la mezquita donde le hizo inmolarse”, ha declarado la policía.
El amor religioso que se profesan entre correligionarios musulmanes se plasma en las bombas que se lanzan mutuamente en todo el orbe.
¡Amor de madre islamista!
La policía iraquí ha detenido la semana pasada a la madre del niño-bomba y al novio de la madre (viuda).
Si ese es el amor fraternal entre correligionarios, ¡qué harán con los judíos y cristianos, a los que califican de infieles y enemigos!
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