A raíz de la publicación de una síntesis de las estadísticas que la Legión de Cristo entregó a la Oficina Central de Estadísticas de la Iglesia –como hacen todas las congregaciones religiosas–, a finales de junio de 2011 se dispararon una serie de titulares e informaciones confusas que invitan a una reflexión sobre el periodismo que se hace.
En línea general, la mayoría de los reportes publicados por agencias y periódicos hablaban de un «éxodo masivo». Esos titulares dan la impresión de que la Legión se está vaciando. Como se puede ver en la parte del informe sobre el «estado numérico de la Congregación al 31 de diciembre de 2010», compartido en el blog «» (véase . En lengua inglesa también se publicó ), la realidad es otra. Los datos son, por lo demás, fácilmente consultables.
Un defecto no pocas veces repetido en noticias relacionadas con la Iglesia católica en general es valerse de datos para hacerles decir lo que de hecho no dicen. Desde luego que en el contexto que vive la Legión de Cristo se puede comprender que las revelaciones sobre la vida del fundador han jugado un papel en la decisión de quienes han salido de ella, pero es equívoco universalizarlo e interpretarlo como la causa única cuando, tanto en el caso de los sacerdotes como –sobre todo– en el de los religiosos que aún no lo eran, cada año hay bajas en virtud de que a la luz de Dios se aprecia que éste no es el camino para ellos.
Desde luego que no se trata de reducir esto a un tema de números cuanto de reflejar lo que realmente indican los datos, sin quitar pero tampoco sin inflar; hacer buen periodismo, en definitiva. Por lo demás, es consolador constatar que esos sacerdotes que han pasado al clero diocesano siguen haciendo una gran bien a las almas. Esto llena de alegría porque su respuesta de amor al Señor que les llamó la siguen cumpliendo.
Volviendo al tema del «defecto» referido dos párrafos arriba, algo más o menos análogo sucedió con el texto publicado el 27 de junio de 2011 por la agencia aci prensa. Se trataba de un artículo construido con extractos de una entrevista que les concedió el P. Luis Garza Medina, L.C., vicario general de la Legión de Cristo (cf. «»).
El reporte de aci comienza así: «El Vicario General de la Legión de Cristo, P. Luis Garza, dijo a ACI Prensa que las autoridades de la Congregación dejarían sus puestos a nuevos líderes en el siguiente capítulo general previsto, inicialmente, para comienzos del año 2013». Pero a continuación la referencia textual del entrevistado es la siguiente: «en cualquier congregación religiosa las autoridades cambian con el tiempo, así que creo que el capítulo general será un momento normal, me parece, para cambiar el liderazgo».
Además de que llama la atención que propiamente, al menos en el texto publicado, no haya una referencia tácita y definitiva del P. Luis a que el capítulo vaya a ser en 2013, resulta aún más sorprendente que los titulares publicados en prensa generalista (basados en la información de aci prensa) iban completamente en otra dirección. Ejemplos: «Nuevo golpe a los Legionarios: Corcuera queda fuera» (cf. La Vanguardia, 28.06.2011), «Cambiará directiva de Legionarios en 2013» (cf. Milenio, 28.06.2011), «El Vaticano da otro golpe a Legionarios: saldrá Corcuera» (Excelsior, 28.06.2011); y así un largo etcétera.
Por lo que respecta a la información de aci, advertir del equívoco, seguramente bienintencionado, sobre el párrafo que dice: «En ese tiempo [se refiere a 2007, n.d.r.] circularon también informaciones que daban cuenta de un "voto de humildad" que también se suprimió. Este voto prohibía a los miembros aspirar a alguna posición como superior dentro de la congregación». Este voto no está suprimido. Sobre el comentario final de una persona ahora ajena a la congregación ayuda mucho aquel recordatorio del P. Loring, S.J., en su .com: «la reforma la han realizado los que se han quedado, no los que se han marchado».
Por lo demás, es ordinariamente en un capítulo general donde una congregación religiosa renueva o mantiene los cargos de las personas que en ella sirven como superiores. En este sentido, no es que haya emergido «nueva información» sino que lo que no se conocía se ha presentado como novedoso.
El profr. Diego Contreras, decano de la facultad de comunicación institucional de la Pontificia Universidad de la Santa Cruz en Roma, dice que «hay un requisito fundamental para dedicarse al periodismo: saber leer […] Saber leer significa entender lo que dicen los textos, no lo que me gustaría que dijeran».
Este artículo no es una «defensa» sino una invitación a leer mejor la prensa, identificar sus equívocos, no creerse inmediatamente lo que es publicado, contrastar fuentes y, quizá también, la oportunidad de regalar a quien inventa el obsequio del cambio de periódico.