Un grupo de 120 sacerdotes protestan por el elevado coste de la visita del Papa a Madrid en agosto

Recojo la noticia de www.excite.es

 Dice lo siguiente:

 

 

La visita del Papa a Madrid el próximo mes de agosto parece no contar con el beneplácito de toda la Iglesia Española, al menos, en lo que a los costes de la misma se refiere.

Así lo han expresado un total de 120 sacerdotes que no han dudado en firmar una carta conjunta en la que muestran su desacuerdo por la manera en la que el cardenal Rouco Varela está gestionando este asunto.

Y es que, tal como denuncian, la llegada de Benedicto XVI a nuestro país generará tal cantidad de gastos que Rouco Varela no ha dudado en recurrir al patrocinio de hasta 40 firmas españolas cuyos logotipos ya aparecen en la página oficial del evento. Entre ellas, financian la visita papal Iberia, Coca Cola, Telefónica o el Banco Santander.

Según argumentan estos sacerdotes que se han denominado Foro de Curas de Madrid, en la actual situación de crisis económica que atraviesa el país resulta contradictorio que las compañías estén dispuestas a aportar altísimas cantidades de dinero para sufragar la visita del Papa a Madrid entre los días 18 y 21 de agosto en lo que se ha denominado como la Jornada Mundial de la Juventud.

No es la primera vez que un viaje de Benedicto XVI genera críticas en relación con su elevado coste. Ya el año pasado en Reino Unido su visita supuso un desembolso de más de 11 millones de euros lo que generó el disgusto de los ciudadanos.

         Ante esta noticia se me ocurre pensar que aquí estamos de nuevo con las dos Iglesias de siempre. Los que intentan apoyar al Papa en su empeño por un mundo mejor, por una fidelidad a la fe más seria, por una preocupación por la salud espiritual de las almas especialmente de los jóvenes, siempre desde la pura doctrina católica, y por otro lado los “protestantes” de costumbre, que sólo ven inconvenientes, motivos económicos, “escándalos” infundados, preocupación por los pobres de bolsillo, que no de espíritu… Son los “antimagdalenas” que protestan por el valor del ungüento derramado en los pies de Jesús, y no aprecian el amor que invierte aquella mujer conversa.

         Dice Jean de La Bruyére: Si la pobreza es la madre de todos los vicios, la carencia de espíritu es el padre. Y este el gran mal que estamos padeciendo, la total indigencia de las almas de los jóvenes que se debaten en un mundo materialista, desalmado, productor de momias sin cabeza ni corazón.

         Y el Papa viene a traer un poco de agua fresca a tantas almas sedientas, que como ovejas sin pastor deambulan por los caminos que el materialismo ha ido roturando como salida hacia ninguna parte.

         Para el Cardenal Rouco la JMJ no es un simple evento festivo, sino una necesidad espiritual para el joven de hoy: «A la vista está que es un acto de la Iglesia que quiere ofrecer a los jóvenes la posibilidad de encontrarse con Cristo de una forma viva y activa, no sólo en un acto de amistad y compañerismo, sino de comunión eclesial y humana»

         Que no seamos mezquino, miopes, aguafiestas. Que a los sacerdotes no tengan que darnos lección de amor a la Iglesia a aquellos que están trabajando para hacer posible este histórico encuentro de jóvenes del mundo con Benedicto XVI. Como diría Nietzsche, “quien siembre en el espíritu, planta un árbol a larga fecha”.

Juan García Inza

Juan.garciainza@gmail.com
V
ídeo oficial de la JMJ:

 www.youtube.com/watch