Algunos se creen que con negar la existencia del infierno, se acabó el problema.

¡NI HABLAR!

De nada sirve negar lo que Cristo, DIOS, ha dicho.
Cristo a dicho que el hombre sigue vivo después de la muerte en el cielo o en el infierno; y contra la palabra de Dios nada sirven las palabras de los hombres.

Como si uno dice que no cree en la ley de la gravedad y se tira desde lo alto de un edificio: se mata, aunque no crea en la ley de la gravedad.

Lo lógico es aceptar lo que dice el que sabe más que nosotros, aunque a veces nosotros no lo entendamos bien.

Yo sé que estoy viendo un partido de fútbol por la televisión, y puedo no entender el cómo llega la señal a mi casa.

Me fío de los técnicos.
Con más razón debo fiarme de Jesucristo.

JORGE LORING, S.I.
jorgeloring@gmail.com