Quiero difundir un sermón de San Pedro que hizo tal impacto entre los judíos que después de oírlo, dice San Lucas, la comunidad judía llegó a las 5.000 personas.
San Lucas, en Hechos de los Apóstoles (3:116) narra el milagro de San Pedro curando a un paralítico en la puerta del templo de Jerusalén, y después el sermón que pronunció San Pedro: “¡Israelitas! ¿Por qué os asombráis como si hubiéramos hecho caminar a éste con nuestro propio poder? El Dios de nuestros padres ha glorificado a Jesús, al que vosotros entregasteis a Pilatos, cuando él había decidido dejarlo libre. Vosotros rechazasteis al santo e inocente, y pedisteis que indultasen a un homicida. Y Dios lo ha resucitado de entre los muertos. Nosotros somos testigos de ello. Y porque ha creído en su Nombre, éste que conocéis y estáis viendo, ha recibido la salud en presencia de todos vosotros”.