Alrededor de un millón de afganos son adictos al opio, que se utiliza para procesar heroína y forma parte de la savia de la economía de Afganistán, que se exporta mayormente a través de Irán.
El dinero de las drogas sirve para financiar el islamoterrorismo y debilitar a la juventud occidental.
La web árabe Arab Herald ha publicado el martes 25 de enero 2011 que Afganistán es un importante productor de opio del mundo y se enfrenta a una epidemia cada vez mayor del consumo de drogas en el país, así, con los niños en algunas zonas está dando la droga, que es una forma sin procesar de la heroína.
En muchas zonas rurales de Afganistán, como la remota provincia de Balkh, el consumo de opio ha devenido en una tradición arraigada y forma de vida, con casi todos los habitantes adictos a la droga.
Los talibanes controlan la mayor parte del país, excepto la capital Kabul.
A los niños afganos se les suministra opio cuando enferman.
¡Que futuro espera a un país cuando el opio y el nihilismo y culto a la muerte del islamismo son las drogas que se suministran a los niños afganos!
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