La demagogia izquierdista, la pobreza e ignorancia, y el islamoterrorismo
La demagogia izquierdista repite hasta la saciedad que el apoyo al islamoterrorismo es producto de la pobreza e ignorancia de los que lo sustentan.
Pero la realidad muestra que precisamente el apoyo financiero, ideológico y material al Yihad procede de los sectores pudientes de Arabia Saudita, como el de los príncipes árabes que patrocinan el islamoterrorismo; y el de los mulás, los clérigos musulmanes que constituyen la clase dominante de Irán, y que el dinero que malgasta y derrocha la aristocracia económica de los países árabes en inútiles fastuosidades, insulto a la inteligencia, enaltecimiento a la insolidaridad, no provocan en las masas árabes y/o musulmanas rechazo a los que malgastan la riqueza natural de sus países.
La ignorancia sirve como excusa a los que desconocen el poder ideológico del fanatismo religioso islámico.
En Europa, hace ocho décadas se levantó el nazismo en uno de los países más cultos y con una larga pléyade de filósofos e intelectuales, Alemania. El fanatismo criminal del antisemitismo nazi y el odio extremo hicieron intelectualmente ridículo y estúpido el brutal, monstruoso, sanguinario y asesino comportamiento de aquellos nazis europeos en general, y alemanes y austriacos en particular.
Hoy, la Gran Bretaña, uno de los pocos países que combatió contra el fascismo y el nazismo, y también uno de los países europeos más cultos y con una pléyade de filósofos e intelectuales, y una de las naciones de más larga historia de democracia y tolerancia dentro de los europeos, tiene un 32% de estudiantes musulmanes británicos que apoyan matar por el Islam, y el 40% quiere que la ley islámica se imponga en el Reino Unido.
Según un nuevo estudio realizado en 30 universidades en Gran Bretaña, el joven estudiante musulmán es extremadamente radicalizado. La encuesta preguntó a 600 estudiantes musulmanes y 800 de sus compañeros no-musulmanes sobre temas políticamente delicados como el asesinato en nombre del Islam y la ley de la Shari´a y los resultados fueron como la noche y el día entre los dos grupos. [1]
Si bien casi nadie en la muestra de no-musulmanes aceptó matar en nombre de la religión, básicamente un tercio de todos los estudiantes musulmanes en Gran Bretaña apoyó asesinar en nombre del Islam.
La encuesta fue revelada como parte de un cable secreto diplomático que surgió de la Embajada de EEUU en Londres.
Si esto ocurre en un país con larga y amplia trayectoria democrática y de tolerancia y que nunca fue islamizado, ¿qué resultados daría si la encuesta fuera bien realizada y con garantías de plena confidencialidad, en España, un país joven en democracia y que es considerado por los musulmanes como “territorio profanado por los cruzados”, y antaño parte del Al-Andalus, junto a Portugal, al que hay que reislamizar? [2]