El pasado martes tuve el privilegio de asistir a la presentación del libro de José Javier Echave-Sustaeta con el título Monseñor Manuel Irurita, Obispo de Barcelona. Mártir por querer que Cristo reinara en su diócesis.

Recogemos la intervención del Dr. José María Alsina Roca que nos cede para poder publicarla en este blog.

MONSEÑOR MANUEL IRURITA OBISPO DE BARCELONA. MÁRTIR POR QUERER QUE CRISTO REINARA EN SU DIÓCESIS. CAUSAS DE SU MUERTE MARTIRIAL Y PRUEBAS CIENTIFICAS QUE LA CREDITAN

Agradezco  muy sinceramente la invitación a presentar este libro ,con un título  tan significativo y gratamente provocador , título que es ya un resumen  de todo su contenido: se afirma que el obispo Irurita fue realmente  mártir ,y se exponen de forma clara y contundente la pruebas de la veracidad del hecho martirial. Por ello creo que mis palabras están  simplemente dirigidas a darles un consejo,  que me agradecerán: lean el libro de  José  Javier Echave. Es un libro que es valiente, oportuno y necesario. Explico las razones de esta triple cualidad. 

Es un libro valiente.

El asesinato de  Monseñor Irurita movido por el odio a la fe en el cementerio de Moncada, ha estado rodeado de una muralla de silencio y de  negación. Por un doble motivo, primero por no querer reconocer la labor de un obispo santo que mereció el martirio como corona de su fecunda  labor pastoral a lo largo de toda su vida, y especialmente en las difíciles circunstancias en que fue obispo de  Barcelona.  En segundo  lugar lo que quieren que se olvide   es la persecución que la Iglesia sufrió en Cataluña durante la república y la guerra civil. . Entre los que la impugnan ha  habido los maledicentes y los ignorantes. Lo primeros no tienen  remedio, el peor ciego es el que no quiere ver, pero ante lo segundos, que influidos por escritos sin fundamento real  y  falsos testimonio, se han  sumado  a los primeros, espero que este libro pueda ayudarles a ver la realidad de los hechos. Solo comprobar las distintas, rocambolescas y contradictorias  historias que se han tenido que inventar para negar los hechos son una fehaciente  prueba de que se está queriendo ocultar la realidad. En el libro se van analizando y desmintiendo cada uno de estas fabulas con precisión y con evidencias y argumentos  propios  de la condición de abogado de su autor  que tiene que demostrar lo que él defiende.

Es un libro oportuno

Vivimos en una situación política caracterizada por la multiplicación de leyes inicuas, entre ella ahora quiero fijarme en la ley llamada de memoria democrática del 9 de octubre del pasado año. Una ley que se la debería llamar de la anti-memoria porque está dirigida a borrar de la  memoria de lo que ocurrido durante la II república y la guerra civil. y de un modo especial olvidar la terrible  persecución religiosa que sufrió la Iglesia durante este período

Es necesario  destacar que  la persecución religiosa a que nos estamos refiriendo se inicia no solo  en los sucesos de octubre del 34 , cuando se producen los primeros mártires  sino en  el conjunto de hechos y leyes que se aprobaron  pocos días después del   14  de  abril de 1931,  recién proclamada la república .Es significativa la anécdota que cuenta el mismo Maura , ministro de aquella desgraciada república  de aquel alcalde de pueblo que pocos momentos después de la proclamación de la república en su pueblo , envió  un telegrama a Maura como nuevo  ministro de gobernación  en los siguientes términos: “Excmo. Sr. Ministro de la Gobernación. Madrid.  Proclamada la república. Diga que hacemos con el cura.”

 A los pocos días quema de conventos en mayo del 31 , expulsión del cardenal Segura, retirada del crucifijo de las escuelas ,expulsión de los jesuitas, aprobación del divorcio, secularización de los cementerios, repetidos incendios de colegios católicos  e  iglesias durante  los años 1932 y 1933 , después  de los sucesos de octubre del 34, nuevos incendios de edificios religiosos y  con ocasión del triunfo de frente popular en las elecciones del febrero del 36, se multiplicaron los actos de violencia  y todo tipo de desmanes revolucionarios.  Este  conjunto de hechos, jaleados por la prensa  izquierdista, reflejan el  envenenamiento a que estuvo sometido el pueblo español durante  aquellos años, y explican y preparan el estallido de violencia del período siguiente.

Aquellos primeros actos de violencia, encontraron sus apologistas ,  en la prensa revolucionaria, pero también desde otras instancias más "serias" ,-los intelectuales defensores del laicismo en la vida pública-, se  acusó a la Iglesia de haber sido  con su conducta histórica  la causante  de  aquella situación .De este modo ,aunque se deploraban los "excesos" de violencia, se justificaba, de hecho,   la  persecución actual y se iba preparando el ambiente  de odio y rencor contra la Iglesia.   La opinión de Salvador de Madariaga  es un ejemplo de esta actitud: “ La Iglesia solía ponerse infaliblemente al  lado de las peores causas de la vida nacional,  apoyando siempre al poderoso al rico y a la autoridad opresora... su influencia sobre  el país es esencialmente retrógrada e irritante.” 

 La legislación anticlerical de la   II República , la persecución religiosa con derramamiento de sangre martirial, las apologías, o las justificaciones vergonzantes  de todos estos hechos , solo se entiende plenamente si tenemos presente  el  lugar que ha ocupado la fe cristiana , tanto en la vida privada como en  la pública , a lo largo de la historia de España.

Se trataba  de desarraigar definitivamente la fe cristiana  de la vida de España .Es decir, hacer efectivo el propósito expresado por los liberales del siglo XIX , de "cambiar la naturaleza de los españoles". Para ello era necesario erradicar totalmente  la presencia social de la Iglesia. En el siglo XIX, aunque también hubo estallidos de violencia con matanza de frailes y quemas de conventos,  no obstante las medidas descristianizadoras mas importantes fueron la supresión de las órdenes religiosas y  las leyes desamortizadoras de los bienes eclesiásticos, justificadas, también en su momento, como algo necesario para ponerse a las alturas de las exigencias de los nuevos tiempos y del progreso. Desgraciadamente su eficacia fue muy importante,  y hasta tal punto tuvieron consecuencias  descristianizadoras,  que los misioneros populares de principios del siglo XX, hacían notar como en muchos lugares, a partir de la expulsión de los religiosos de sus conventos y monasterios había   casi desaparecido la práctica religiosa. Con todo, una serie de factores históricos y sociológicos, pero especialmente la misma fuerza de la fe cristiana,  dieron lugar a que el propósito liberal  de "cambiar la naturaleza de los españoles"  pudiera darse entonces por fracasado.

A partir de la instauración de la segunda república, se inicia una nueva fase del viejo proyecto descristianizador.  A la nueva situación  podrían aplicarse con propiedad las palabras  de Karol Wojtyla en Signo de Contradicción:" La persecución es el  programa de nuestro tiempo"

El mismo Azaña, Presidente de la República poco días después del 18 de Julio, cuando ya se  veían los derroteros de la  nueva situación, declaró: “Ahora es cuando de veras se ha proclamado la república”,  y Companys, Presidente de la Generalitat de Cataluña, afirmará en aquellos días, justificando la persecución religiosa, que en Cataluña tuvo especial virulencia: “hay instituciones violentamente odiables  el clericalismo , el militarismo y el latifundismo.... el movimiento del cual ahora sois testigos es  la explosión de una inmensa cólera, de una inmensa necesidad de venganza subiendo del fondo de los tiempos”.  Con  esta actitud se  justificaba también la creación, según  decreto de la Generalidad del 23 de julio, de las milicias antifascistas y de los comités locales,  principales responsables de la la persecución religiosa sistemática  llevada a cabo en Cataluña durante los meses de finales del  36 y principios del 37.

Es un libro necesario

Vivimos tiempos convulsos y de gran confusión social ,cultural y religiosa  ,necesitamos asaltar el cielo con nuestras oraciones y tenemos que encontrar intercesores para que Dios tenga misericordia de este pobre mundo, y de todos nosotros, hay que tener presente a  los mártires y ello  es necesario para que vivamos con esperanza , ellos nos dieron el ejemplo dando su vida por aquello que era lo más importante de su vida , y con la conciencia de que su ofrecimiento tenía que fructificar  con el cumplimiento de las promesas del Sagrado Corazón de Jesús :” Reinaré en España”, por ello tantos mártires murieron con el grito de Viva Cristo Rey en sus labios ,perdonando  a su asesinos. A ellos debemos acudir en estos momentos, esta es la razón por la que  me parece tan oportuno el libro de Javier Echave, que nos invita a superar tantos olvidos y a tenerlos presentes a nuestros  en nuestras vidas y en nuestra oración.

Termino recordando unas palabras Karol Wojtyla  de su libro antes mencionado:

“Hemos entrado en los últimos veinticinco años del segundo milenio después de Cristo, nuevo Adviento de la Iglesia y de la humanidad. Tiempo de espera y, juntamente, de una decisiva tentación; de alguna forma, siempre la misma que conocemos por el capítulo tercero del Génesis, pero en un sentido cada vez más radical. Tiempo de gran-des pruebas, pero también de gran esperanza. Precisamente para este tiempo se nos ha dado la señal: Cristo, «signo de contradicción» (Lc 2,34). Y la Mujer revestida del sol: «Señal grande en el cielo» (Ap 12,1)

Muchas gracias  Javier por tu libro,  Dios quiera que sea un instrumento eficaz para que veamos  un día en los altares a nuestro  querido y admirado obispo Irurita.