Ha pasado poco más de un mes y TIME vuelve a la carga contra la Iglesia católica. Esta vez lo hace con un artículo de un supuesto creyente, Tim Padgett, publicado en el portal on line del semanario y que titulan: “The Vatican and Women: Casting the First Stone”.
La perorata de esta ocasión aparece el 19 de julio de 2010, cuatro días después de que se hicieran públicas las nuevas normas –leyes– sobre los delitos más graves contra los sacramentos y la fe y que incluyen también una actualización sobre los procedimientos jurídicos a seguir en el tema de los abusos sexuales por parte de clérigos (el texto explicativo del padre Federico Lombardi, portavoz de la Santa Sede, sobre estas nuevas leyes se puede leer en este ).
Después de los de TIME en periodismo religioso uno esperaría algún texto interesante, equilibrado y honesto. Pero justamente lo contrario es lo que abunda en el artículo de Tim Padgett.
Ya es significativo que inicie con una aseveración falsa cuando, en el afán de erudición bíblica, muestra ignorancia al afirmar que la tradición de la Iglesia ve en María, la hermana de Lázaro, a María Magdalena. Más adelante, contradiciéndose, identificará a la misma María Magdalena con otro personaje: la mujer sorprendida en adulterio, la que va a ser lapidada y Jesús salva al decir que quien esté libre de pecado tire la primera piedra. No hubiera estado de sobra saber quién, según Tim, defiende eso actualmente, pero las afirmaciones gratuitas no cuestan.
Padgett no se contenta con exhibir su ignorancia en materia de Nuevo Testamento sino que va más allá al llamar “declaración misógina” a las . ¿Por qué? Porque el documento antes aludido recuerda, en sintonía con un , que entre los delitos contra la fe se encuentra el intento de ordenación sacerdotal de mujeres.
De ahí pasa a tachar a la Iglesia de discriminatoria contra los homosexuales. Lo hace al referir que recientemente, según el mismo autor, la Iglesia en Argentina abogó por la “subhumanidad de los homosexuales”, en los días previos a la imposición del gaymonio en ese país sudamericano.
Padgett brinca después a la ficción de su personal fantasía al mencionar que las masas católicas están a favor de la ordenación de mujeres y la inflexibilidad de la Iglesia en este punto, así como a lo que él llama “condena” de la homosexualidad (cita una encuesta del grupo demoscópico Gallup según la cual el 62% de los católicos en Estados Unidos está a favor de la homosexualidad y llama a los obispos “homófobos con mitra”), considerando todo esto como un mero disfraz para encubrir los errores de los clérigos que han fallado e incurrido en abuso sexual de menores.
Curioso que, como en tantos otros textos de TIME, no se cite u ofrezca el enlace en donde, según el padre del artículo, la Iglesia abogó por la “subhumanidad” de los homosexuales (que de existir, cosa altamente dudosa, no es enseñanza de la Iglesia. Lo que sí enseña la Iglesia es lo que dice sobre la homosexualidad en el número 2358 del Catecismo de la Iglesia Católica). Sobre los datos de Gallup, quizá hay que revisar mejor los números y ver los matices completos (aquí el ) para no errar ni simplificar, cosa que tanto gusta a TIME y sus acólitos anti Iglesia.
Es evidente que, una vez más, lo que exhibe TIME en el escaparate de sus páginas, tanto impresas como digitales, no es precisamente el fruto del periodismo de verdad (que acusa reflexión, confrontación de fuentes y conocimiento de lo que se va a hablar). Tan sencillo que hubiera sido leer las fuentes originales y pensar un poco para sacar algo más apegado a la verdad.
Por si ayuda a Tim Padgett, el Vaticano ha puesto a disposición de todo el mundo, también de los periodistas de The New York Times, BBC, Zeitung, El País y TIME, la página desde hace al menos dos meses (aunque algunos la han presentado como novedad en la segunda semana de julio de 2010). En ella se puede conocer qué ha hecho y dicho de modo oficial la Santa Sede. Y la agencia ZENIT, cuyos servicios pueden recibir gratuitamente, sacó precisamente unos días antes del artículo de Padgett una nota iluminadora sobre el tema tratado en TIME (cf. La Iglesia no equipara el abuso de menores con la ordenación de mujeres, del 16.07.2010). Claro está, habrá ignorancias culpables que aún sabiendo que existen estos recursos seguirán despotricando contra la Iglesia.
La perorata de esta ocasión aparece el 19 de julio de 2010, cuatro días después de que se hicieran públicas las nuevas normas –leyes– sobre los delitos más graves contra los sacramentos y la fe y que incluyen también una actualización sobre los procedimientos jurídicos a seguir en el tema de los abusos sexuales por parte de clérigos (el texto explicativo del padre Federico Lombardi, portavoz de la Santa Sede, sobre estas nuevas leyes se puede leer en este ).
Después de los de TIME en periodismo religioso uno esperaría algún texto interesante, equilibrado y honesto. Pero justamente lo contrario es lo que abunda en el artículo de Tim Padgett.
Ya es significativo que inicie con una aseveración falsa cuando, en el afán de erudición bíblica, muestra ignorancia al afirmar que la tradición de la Iglesia ve en María, la hermana de Lázaro, a María Magdalena. Más adelante, contradiciéndose, identificará a la misma María Magdalena con otro personaje: la mujer sorprendida en adulterio, la que va a ser lapidada y Jesús salva al decir que quien esté libre de pecado tire la primera piedra. No hubiera estado de sobra saber quién, según Tim, defiende eso actualmente, pero las afirmaciones gratuitas no cuestan.
Padgett no se contenta con exhibir su ignorancia en materia de Nuevo Testamento sino que va más allá al llamar “declaración misógina” a las . ¿Por qué? Porque el documento antes aludido recuerda, en sintonía con un , que entre los delitos contra la fe se encuentra el intento de ordenación sacerdotal de mujeres.
De ahí pasa a tachar a la Iglesia de discriminatoria contra los homosexuales. Lo hace al referir que recientemente, según el mismo autor, la Iglesia en Argentina abogó por la “subhumanidad de los homosexuales”, en los días previos a la imposición del gaymonio en ese país sudamericano.
Padgett brinca después a la ficción de su personal fantasía al mencionar que las masas católicas están a favor de la ordenación de mujeres y la inflexibilidad de la Iglesia en este punto, así como a lo que él llama “condena” de la homosexualidad (cita una encuesta del grupo demoscópico Gallup según la cual el 62% de los católicos en Estados Unidos está a favor de la homosexualidad y llama a los obispos “homófobos con mitra”), considerando todo esto como un mero disfraz para encubrir los errores de los clérigos que han fallado e incurrido en abuso sexual de menores.
Curioso que, como en tantos otros textos de TIME, no se cite u ofrezca el enlace en donde, según el padre del artículo, la Iglesia abogó por la “subhumanidad” de los homosexuales (que de existir, cosa altamente dudosa, no es enseñanza de la Iglesia. Lo que sí enseña la Iglesia es lo que dice sobre la homosexualidad en el número 2358 del Catecismo de la Iglesia Católica). Sobre los datos de Gallup, quizá hay que revisar mejor los números y ver los matices completos (aquí el ) para no errar ni simplificar, cosa que tanto gusta a TIME y sus acólitos anti Iglesia.
Es evidente que, una vez más, lo que exhibe TIME en el escaparate de sus páginas, tanto impresas como digitales, no es precisamente el fruto del periodismo de verdad (que acusa reflexión, confrontación de fuentes y conocimiento de lo que se va a hablar). Tan sencillo que hubiera sido leer las fuentes originales y pensar un poco para sacar algo más apegado a la verdad.
Por si ayuda a Tim Padgett, el Vaticano ha puesto a disposición de todo el mundo, también de los periodistas de The New York Times, BBC, Zeitung, El País y TIME, la página desde hace al menos dos meses (aunque algunos la han presentado como novedad en la segunda semana de julio de 2010). En ella se puede conocer qué ha hecho y dicho de modo oficial la Santa Sede. Y la agencia ZENIT, cuyos servicios pueden recibir gratuitamente, sacó precisamente unos días antes del artículo de Padgett una nota iluminadora sobre el tema tratado en TIME (cf. La Iglesia no equipara el abuso de menores con la ordenación de mujeres, del 16.07.2010). Claro está, habrá ignorancias culpables que aún sabiendo que existen estos recursos seguirán despotricando contra la Iglesia.