Evo Morales presentó este domingo su dimisión como presidente de Bolivia tras las protestas, las históricas movilizaciones y los disturbios producidos en todo el país tras el presunto amaño de las últimas elecciones.
Ante esta situación los obispos de Bolivia han emitido una nota a través de la Conferencia Episcopal en la que afirman que “lo que sucede en Bolivia no es un golpe de Estado, lo decimos ante los ciudadanos bolivianos y ante toda la comunidad internacional”.
Los pastores del país sudamericano han hecho un llamamiento a los bolivianos “a la paz y no cometer actos vandálicos, ni de revancha, ni nada de lo que podamos arrepentirnos. Tenemos todos una grave obligación de defender la vida de todos los bolivianos”.
"Tener en breve un presidente constitucional"
“En nombre de Dios les decimos: cesen las acciones de violencia y preservemos la vida y la paz. Mantengamos el espíritu pacífico que ha reinado en el pueblo en este tiempo”, agregan.
En tercer lugar, los obispos piden a la “Policía Nacional y a las Fuerzas Armadas de la nación que cumplan con urgencia su rol constitucional de defensa de la propiedad y de las personas, preservando la vida y la libertad de todos”.
Por último, en el comunicado aseguran que están de acuerdo “en proponer a la Asamblea Nacional de Bolivia una solución constitucional y pacífica para tener en breve un presidente constitucional con el encargo de formar un nuevo tribunal electoral y conducirnos a nuevas elecciones de forma que todo el pueblo pueda expresar su opinión en libertad y paz”.
En Oruro se hizo una fiesta, afirma el obispo
Por su parte, monseñor Cristóbal Bialasik, obispo de Oruro, ha explicado a Aciprensa que conoció la dimisión de Evo Morales mientras mediaba en los enfrentamientos entre los mineros potosinos y el pueblo de Cacachacas.
“Hemos escuchado sobre la renuncia del presidente Evo Morales. En ese momento todo el pueblo se reunió para festejar este hecho prácticamente como una victoria porque ya vivíamos en una dictadura y el pueblo era consciente que no quería llegar a la situación de Venezuela”, resaltó el Obispo
“En este momento hay un festejo grande en la plaza principal Oruro y acaban de llamarme para ir allí y rezar y agradecer a Dios por esta gracia que nos ha dado de la libertad”, añadió el obispo de Oruro.
Lo que sigue ahora para Bolivia, dijo el Obispo, es “formar un tribunal electoral lo más pronto posible para las nuevas elecciones. Esto tardaría unos tres meses para buscar la gente, los líderes que puedan dirigir al país durante los próximos años”. Con estos líderes, concluyó el Obispo de Oruro, Bolivia podrá tener “más esperanza y también se podrá respetar la vida y la dignidad de las personas, de todos bolivianos y bolivianas”.