El Papa Francisco, el arzobispo de San Salvador, monseñor José Luis Escobar y la Conferencia Episcopal Mexicana recordaron a las 72 víctimas de la masacre de San Fernando, en el estado de Tamaulipas en México, sucedida hace diez años, a unos pocos kilómetros de la frontera con Estados Unidos, según informa la agencia de noticias de la Santa Sede Vatican News.
Solidaridad del Papa Francisco
“Expreso mi solidaridad con las familias de las víctimas que aún hoy invocan justicia y verdad sobre lo ocurrido”, dijo el Papa Francisco ayer, después de rezar el Ángelus en la Plaza de San Pedro, al recordar que hoy, se cumple el décimo aniversario de la masacre de los 72 migrantes. “Eran personas de diferentes países que buscaban una vida mejor –afirmó el Pontífice– el Señor nos pedirá que demos cuenta de todos los migrantes caídos en los viajes de la esperanza. Han sido víctimas de la cultura del descarte”.
A diez años de la muerte de 72 migrantes
Los fallecidos, 58 hombres y 14 mujeres, eran originarios de India, Brasil, Ecuador, El Salvador, Guatemala y Honduras. Familiares de las víctimas siguen pidiendo justicia al gobierno mexicano para que castigue a los responsables de este crimen. Hace diez años las fotos de decenas de cuerpos de hombre y mujeres, apilados, amarrados y con los ojos vendados y con disparos en sus cuerpos conmocionaron al mundo entero. Hasta el día de hoy no se ha castigado a nadie por este horrendo crimen.
Monseñor Escobar, arzobispo de San Salvador
El Arzobispo de San Salvador, El Salvador, monseñor José Luis Escobar exigió a las autoridades correspondientes, mediante un comunicado publicado ayer, “que se brinde justicia a las víctimas. Y, levantamos la voz para pedir el debido respeto a los derechos humanos para todos nuestros hermanos migrantes”.
En el comunicado, el arzobispo de San Salvador, también recordó el asesinato del sacerdote Ricardo Antonio Cortez, y afirmó: “Es verdaderamente lamentable que en todo este tiempo no haya ninguna noticia de la investigación del crimen”. El obispo pidió nuevamente al gobierno y a las autoridades judiciales que se investigue el caso y se haga justicia.
La voz de la Conferencia Episcopal Mexicana
La Conferencia Episcopal Mexicana, mediante un comunicado expresó: “Este hecho y tantos otros de secuestro, extorsión y asesinatos a tantos otros migrantes antes y después, situación que se sigue dando hasta nuestros días, pone al descubierto la fragilidad del Estado Mexicano frente a la proliferación de grupos delincuenciales que han permeado todo el territorio nacional, así como la vulnerabilidad de toda la población frente a los criminales, pero especialmente de las personas migrantes quienes fácilmente caen en manos de los grupos al margen de la ley”.
Los prelados mexicanos piden “políticas migratorias más justas y accesibles que no obliguen a los migrantes a vivir en la clandestinidad y convertirse en presa fácil de estos grupos”, puesto que “solo favorecen a los grupos criminales que hacen de las personas migrantes un objeto de negocio que les genera altas sumas de dinero”.