“Como Vida Consagrada, invitamos y acompañamos a nuestro pueblo a manifestar su voluntad apegado al sano juicio, a la no violencia, pero con contundencia, para que se corrijan las arbitrariedades que nos llevan a una situación de inminente dictadura”, expresó la Conferencia de Religiosas y Religiosas de Venezuela (CONVER, www.conver.org.ve) en un comunicado firmado el 4 de abril.
La crisis política y social en Venezuela se agudizó luego que la semana pasada el Tribunal Superior de Justicia (TSJ), emitiese dos sentencias que, entre otras cosas, eliminaban la inmunidad parlamentaria y transferían las funciones de la Asamblea Nacional a la Corte. Si bien el TSJ retrocedió y anuló ambos fallos, el Parlamento inició el miércoles un procedimiento contra los jueces que firmaron las dos sentencias.
Asimismo, tanto la oposición como el gobierno de Nicolás Maduro convocaron manifestaciones públicas este jueves, registrándose enfrentamientos en el este de Caracas. Miles de opositores que se dirigían hacia la Defensoría del Pueblo, en el centro histórico de la ciudad, fueron reprimidos por miembros de la Policía y de la Guardia Nacional Bolivariana.
La Conferencia de Religiosas y Religiosas de Venezuela (CONVER), expresó su preocupación por la crisis y la falta de autonomía de los cinco poderes del Estado y animó a la población a manifestarse sin violencia, “pero con contundencia” para “que se corrijan las arbitrariedades que nos llevan a una situación de inminente dictadura”.
Los religiosos y religiosas denunciaron que en el país existe una “falta de autonomía entre los cinco (05) poderes públicos: Ejecutivo, Legislativo, Judicial, Electoral y Ciudadano”, tal como establece la Constitución de 1999.
En ese sentido, explica la agencia Aciprensa, respaldaron las palabras de la Conferencia Episcopal Venezolana, que el pasado 31 de marzo señaló que los fallos del TSJ eran “decisiones moralmente inaceptables y, por tanto, reprobables”.
Asimismo, denunciaron “la indolencia del gobierno nacional ante la situación crítica que vive nuestro pueblo, demostrando una vez más que sólo le interesa la lucha por mantenerse en el poder, sin importarle el precio ni las consecuencias de desoír la voz del pueblo que clama por atención, comida, medicinas, seguridad, educación y una sana convivencia en paz”.
“Les hacemos un llamado –expresó la CONVER– para que den los pasos firmes requeridos que permitan al país volver a la normalidad, garantizando los procesos democráticos que redunden en el bien de los habitantes de Venezuela”.
Antes de finalizar, los religiosos pidieron a Dios que “bendiga a nuestro pueblo que sufre, y que la Virgen de Coromoto, conocedora del sentir venezolano, sea la madre que acompaña a sus hijos que vivimos sumidos en el dolor y el desconcierto, causado por políticas voraces que simplemente empobrecen a la nación a cambio del enriquecimiento inescrupuloso de los políticos de turno”.
Junto a la crisis política, está la aguda situación económica que enfrenta el país, cuya principal fuente de ingresos es la exportación de petróleo. El año pasado el Fondo Monetario Internacional (FMI) estimó en el 2017 la inflación podría llegar a 724%. Además se estima que hay un 74% de desabastecimiento en alimentos y 76% en medicinas. Asimismo, de acuerdo a la encuesta “Condiciones de Vida” ENCOVI 2016, la pobreza alcanza al 30,2% de la población y la pobreza extrema al 51,5%.