Un siglo en el que la obra de su fundadora, una eugenésica y racista convencida cuyo lema era ‘Control de la natalidad: crear una raza de purasangres’, ha logrado cumplir sus sueños provocando decenas de millones de abortos y expandiendo estas prácticas a todo el mundo.
Su sucesora al frente de Planned Parenthood, Cecile Richards, comparte principios y programa con la que puede ser futura presidenta de Estados Unidos. Ambas defienden el aborto libre y el gran negocio que genera.
Estas son las escalofriantes cifras de Planned Parenthood en Estados Unidos: sólo en 2014 este grupo practicó 323.999 abortos en EEUU, uno cada 97 segundos. Y desde 1978 ha realizado siete millones. Habría que sumar muchos millones más de sus filiales y asociadas en otros países, integradas en la IPPF (International Planned Parenthood Federation).
Los vídeos de David Daleiden en los que se mostraba el comercio de órganos y trozos de bebés abortados que realiza Planned Parenthood ha abierto los ojos a muchos. El Congreso y el Senado quieren retirarle la financiación aunque Obama se ha negado y Clinton ya ha anunciado que seguirá destinándole fondos públicos.
Pero Planned Parenthood no se conforma solo con esto, quiere mas. Con la ayuda de su amiga Clinton quieren seguir expandiendo el aborto y los anticonceptivos por todo el mundo pues el negocio se dispararía aún más. Y el objetivo número uno es América Latina.
El Papa Francisco ha alertado en numerosas ocasiones sobre una “colonización ideológica” con la que organizaciones supranacionales, estados e importantes organizaciones pretenden imponer a base de dinero y de presiones la ideología de género y la cultura de la muerte, construida sobre el aborto y el miedo a la fertilidad.
Y, precisamente, ideología de género y aborto van de la mano en las políticas exteriores de Estados Unidos, que llevan años intentando que el continente americano sucumba a sus postulados.
Las sociedades latinoamericnas se niegan a ser colonizadas por lo que son los estados presionados por poderosos lobbies como el de Planned Parenthood los que están intentando vencer esta resistencia.
Un ejemplo es Chile, donde hay una ofensiva total para legalizar el aborto en un país en el que no es legal y donde existe la tasa de salud maternal más altas de todo el continente (superada sólo por la riquísima Canadá).
O que se lo digan a República Dominicana, donde el embajador de EEUU, el homosexual militante James Brewster, siempre acompañado de su "marido" (ante la ley norteamericana) no ha parado ni un segundo de intentar imponer esta ingeniería social a un país muy cristiano. Las quejas de obispos y del Gobierno dominicano no han cesado pero poco ha importado esto a la diplomacia estadounidense.
Multitudinaria manifestación provida en Chile
Pero además de la diplomacia estadounidense, la ONU también tiene mucho que decir. Desde Naciones Unidas se trabaja desde el chantaje: o aprueban leyes que legalicen el aborto, permitan todo tipo de anticonceptivos y asuman la ideología de género o no habrá fondos para estos países.
De hecho, el propio Fondo de Naciones Unidas para la Población financia los proyectos de Planned Parenthood que más tarde pone en práctica en América Latina. Además, el grupo abortista colabora con otras organizaciones como la OMS, Unicef y con la Organización de Estados Americanos.
Naciones Unidas es un gran aliado de Planned Parenthood en su expansión por el mundo
Además, el adoctrinamiento es también parte esencial en todo esto. El propio Fondo de Naciones Unidas para la Población ha publicado un informe en el que propone adelantar el adoctrinamiento sexual de los niños en temas como los anticonceptivos y el aborto a los 10 años.
En su opinión hacer esto es clave “particularmente para una niña de diez años de edad, que acaba de empezar su viaje a través de la adolescencia y que llegará pronto a la pubertad”. A mayor adoctrinamiento, mayor hipersexualización de la sociedad y más aborto. Una auténtica regla de tres.
De todo esto se aprovecha además Planned Parenthood que ve un filón demasiado grande en América Latina como para poder dejarlo escapar. Su inversión en esta parte del continente es cada vez mayor. En 2014 ya financió con más de 10 millones de dólares a distintas organizaciones abortistas de estos países.
Al igual que hace en Estados Unidos, Planned Parenthood alecciona muy bien a sus filiales sobre cómo deben vender su actuación. A las organizaciones proabortistas americanas se les dice que promocionen sus servicios como un servicio integral para la mujer, que le ayuda en su salud sexual y contra enfermedades como el cáncer de mama. Sin embargo, la realidad contradice esto pues el gran negocio de este grupo es el aborto mientras que las mamografías apenas suponen un 3% de su negocio.
Planned Parenthood financia grupos de presión para que se apruebe el aborto
Este es el desglose del gasto de Planned Parenthood destinado sólo en 2014 a promover el aborto mediante la financiación de distintas organizaciones:
-Perú: 1,1 millones de dólares
-México: 731.000 dólares
-Argentina: 871.000 dólares-
-Colombia: 1,18 millones de dólares
-Honduras: 497.000 dólares
-El Salvador: 520.000 dólares
-Chile: 169.000 dólares
-Ecuador: 284.000 dólares
-Bolivia: 2,3 millones de dólares
-Uruguay: 563.000 dólares
-Panamá: 165.000 dólares
-Venezuela: 462.000 dólares
-República Dominicana: 973.000 dólares
-Paraguay: 302.000 dólares